El próximo gabinete de Javier May Rodríguez ha sido recibido con beneplácito entre los tabasqueños, pues no olvidemos que el comalcalquense registró el 80% de los sufragios, un porcentaje amplio que le garantizó la gubernatura.
Las críticas a la conformación de su equipo son mínimas, pero aún se mantienen las expectativas con relación a los nombramientos en Salud y Seguridad Pública, así como del gabinete ampliado, donde unos más que otros ya están vociferando que May los eligió para esta u otra posición: que si el Cobatab, que si la subsecretaría, que si la dirección, etcétera. En ciertos casos, el gobernador electo aún sigue revisando perfiles.
De los nombramientos hechos públicos el pasado 1 de julio, destacan las coberturas periodísticas por las designaciones de Aída Castillo Santiago y de Daniel Casasús, en Cultura y en Obras Públicas y Ordenamiento Territorial.
Sobre el primer caso, si bien con anterioridad el gremio cultural había hecho sugerencias en torno al perfil del próximo titular de Cultura, posterior al anuncio distintas voces se han pronunciado no solo respaldando a Castillo Santiago, sino dándole un voto de confianza. Leí y escuché, sobre todo, voces de escritores, ensayistas, promotores culturales, pintores y poetas.
Sin embargo, entre sus manifestaciones a favor de la designación, también están las lamentaciones de cómo se administró la Secretaría de Cultura en el presente gobierno, y más en los últimos tres años. Es preciso decir que el gremio cultural, en su mayoría, no logró embonar en las políticas culturales de su aún titular Ramiro Chávez, mismo que los denostó en su más reciente entrevista radial.
De entrada, y sabedora de lo que en materia cultural se necesita, Castillo Santiago -con amplia experiencia en administración gubernamental y comunicación- ha dicho que el compromiso del próximo mandatario es
“llevar a todas las comunidades y Centros Integradores, las más diversas expresiones artístico-culturales, y al mismo tiempo, promover y respetar las culturas originarias”.
Estás demás decirles que la próxima titular de Cultura es una mujer de trabajo. El gremio cultural debe estar tranquilo porque ella laborará sin descanso, romperá el monopolio cultural y luchará porque haya mayor inclusión de artistas y escritores. Aunque oficialmente será la secretaria de Cultura en octubre próximo, ya trabaja en el plan cultural y en la transición, a encomienda de May Rodríguez.
Otro de los que acaparó la atención de la prensa fue Daniel Casasús, ex delegado estatal de Programas para el Bienestar. Posterior al anuncio se sumó al discurso de May sobre lo importante de estar a la altura de la encomienda y de lo imprescindible que resulta este periodo de transición, dado que es prioritario saber en qué condiciones se recibirá la Secretaría de Obras Públicas y Ordenamiento Territorial.
Así como Castillo Santiago, Casasús es un político de la confianza del gobernador electo. Basta con recordar que a principio de 2024 buscó la candidatura de Morena a la alcaldía de Centro, y en diversos momentos de la precampaña, destacó por su trabajo político. Esto le favoreció para ser electo como uno de los enlaces, en el equipo de May, con diversos sectores sociales. Por esta razón, no sorprendió su presentación en el gabinete. Pero, sin lugar a dudas, estará al frente de una gran responsabilidad y en donde la ciudadanía está demandando obras públicas en todo Tabasco, dado el olvido del actual gobierno.
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Ayer, la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo presentó a cuatro nuevos secretarios, mismos que asumirán funciones el 1 de octubre próximo: Rosa Icela Rodríguez Velázquez en Gobernación; Adriana Montiel en Bienestar; Omar García Harfuch en Seguridad Pública y Protección Ciudadana; y a Mario Delgado en Educación. No sorprende lo de Harfuch, sí lo de Delgado, el presidente nacional de Morena. Creo que el gremio magisterial sigue esperando a un titular que entienda lo que representa este sector.
@Librodemar