El del agua potable, sin duda alguna, es uno de los temas que –como decíamos en un Altar de la semana pasada— ha decidido atender el gobierno de Tabasco con la construcción de una nueva planta potabilizadora en 2023.
Afortunadamente nuestro Estado cuanta con mantos acuíferos suficientes que permiten avizorar soluciones para que los tabasqueños podamos contar con buen suministro del líquido aunque, obviamente se requiere de una infraestructura con mayor capacidad de acuerdo a la demanda de la población. Y eso es algo que las autoridades estatales buscan remediar según ha dejado en claro el gobernador Carlos Manuel Merino Campos.
Caso contrario es el que viven algunas entidades del Norte del país, como Nuevo León donde la sequía ha provocado estragos a causa de la escasez de agua. Particularmente los habitantes de su capital, Monterrey son quienes han resentido en mayor medida esta situación.
La falta de ese vital líquido ha provocado, incluso, mucha molestia al gobernador de aquel estado Samuel García, a grado tal que en días pasado se quejó por la falta de apoyo de los Estados, cuyos gobiernos dijo no han obrado en reciprocidad como Nuevo León que, según él, los ha apoyado particularmente cuando ha habido problemas por las inundaciones y aportando al Teletón.
Era tanta su exasperación que llegó a decir que no los necesitaba (a los Estados), porque en Nuevo León sacaban agua “hasta debajo las piedras”.
Y enfatizó “ahorita que estamos en crisis no mandan una chingada despensa, no levanta la mano nadie y ¿les digo algo? No los ocupamos, porque aquí sí sacamos debajo de las piedras el agua, el dinero y el orgullo. No ocupamos a nadie los Neoloneses”.
Con esas expresiones el mandatario estatal dejo en claro que, en Nuevo León, los neoloneses no necesitan de la ayuda de nadie ya que ellos sacan debajo de las piedras el agua.
Luego, llama la atención la noticia dada a conocer en su cuenta oficial de Instagram por Samuel García, referente a haber encontrado un tesoro (agua), en la comunidad del Arbolito en el cañón del ejido Nuncio, colindante con el municipio de Rayones, Nuevo León.
Hecho que de ipsofacto alertó a Nerio Maltos, Director de la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento (CEAS) del Estado de Coahuila quien manifestó “si se refiere el Gobernador (de Nuevo León) al agua de Arteaga, ésta ya tiene dueño. Hay comunidades que la utilizan y está concesionada para ellos. De haber un interés de llevarse el agua a Monterrey, tendría que hablar con los dueños”.
Resulta ser que la situación se da por la cercanía entre Rayones Nuevo León y el Municipio de Arteaga, Coahuila, por lo que existen escurrimientos del vital líquido que inclusive van a dar a poblados de Nuevo León, como Casillas y Rayones.
Por su parte, el Alcalde de Arteaga, Coahuila señaló que “Si de las Trancas, Nuevo León, él quiere conducir el agua para llevarla a Monterrey pues está en todo su derecho de hacerlo porque esa agua atraviesa por su territorio.
Así las cosas, parecería que Samuel García, en su afán por resolver el problema por la falta de agua en la ciudad de Monterrey, no sólo la está buscando debajo de las piedras, sino hasta fuera del territorio neolonés, y algo parecido posiblemente sea la idea de secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, al anunciar que en un intento por ayudar a algunos estados del Norte, como Sonora –por ejemplo— se podría hablar de un proyecto para llevar agua desde Tabasco hacia aquella entidad.
En todo estos habrá que ver finalmente en que queda todo este embrollo: si como dicen los funcionarios de Coahuila (CEAS y Presidente Municipal de Arteaga), el vital líquido ---que el gobernador de Nuevo León dijo haber encontrado y que calificó como un tesoro-- está concesionado o no.
Pero también habrá que ver que dice la CONGUA respecto a este interesante asunto. (altar_mayor@yahoo.com.mx)