El precio del barril de crudo en los mercados a nivel mundial ha sufrido diferentes cambios, causados por incertidumbres en la demanda, economía, inflación y por condiciones ajenas al comportamiento natural de la oferta – demanda, como la invasión de Rusia a Ucrania.
Esto ha dado pie a valorar en qué tanto afecta la economía de un país, si este depende del precio del barril para poder obtener ingresos para el gasto corriente anualizado en forma periódica, estableciendo en los dineros de entrada un precio de barril esperado, y que pueda dar una proyección del dinero disponible para programar en donde gastar.
Pero debemos recordar que todo el mercado de hidrocarburos impacta en forma directa a cualquier nación, y esto ha sido comprendido, analizado e confirmado en los dos últimos años. Ha quedado en claro que esta industria controla a la mayoría de las economías con base a las transacciones de exportación e importación de hidrocarburos o sus derivados, y que depende de la demanda dentro de un mercado interno.
En México del total de los ingresos, el sector petrolero representa entre el 18 a 20% (antes del 2013 representaba entre el 30 a 40%). Este porcentaje de dinero proviene del cálculo realizado entre la producción total de crudo líquido, costo de barril de crudo esperado y volumen de exportaciones a realizar de la empresa pública y privados.
Esta combinación en los últimos dos años ha representado para México arriba de un billón de pesos de ingresos para la nación, y en 2023 espera repita esta misma cantidad que podría llegar a los 1.3 billones. A partir de esta aseveración neta financiera, México está presentando no una codependencia total de esta industria: es y continuará siendo parte de la columna de ingresos, el mercado de hidrocarburos, cuando al menos en más de tres décadas.
El problema no radica en un cambio abrupto en la organización de PEMEX, al pretender desaparecer a PMI comercio internacional, la cual es un brazo ejecutor para mejorar la comercialización de los hidrocarburos líquidos (crudo) y derivados para su venta en mercados internacionales, a los cuales tiene acceso. Tiene operaciones en más de 20 países, a donde cuenta con centros de almacenamiento, logística y oficinas para realizar transacciones comerciales de hidrocarburos. Además, siendo que esta empresa es la que está operando la refinería de Deer Park, al contar con un registro ante las autoridades de nuestro vecino para poder operar o comercializar lo que ahí se produce.
Dejemos a PEMEX como está, y centrémonos en el error que podemos cometer al dejar de comercializar hidrocarburos, principalmente el crudo. Por lo tanto, analizaremos algunas acotaciones del porqué no se puede dejar de exportar.
1. La ley de ingresos de México depende del precio de venta de cada barril que pretende ser exportado o comercializado dentro de México. Esta es una variable, utilizada para disminuir el déficit entre el ingreso y egresos por parte de la Cámara de Diputados, aumentando o disminuyendo el precio del barril. Pregunta ¿Existe otra variable que sustituya al precio del Barril? Respuesta: por el momento no hay otra. Porque los valores macroeconómicos donde están las variables presentadas por la Secretaria de Hacienda y Crédito Público (SHCP), no mueven la aguja del dinero para la nación.
2. En los objetivos en el presupuesto por parte del SHCP , indicando cuanto será enviado a refinerías (en función de una utilización) dentro de México y cuanto crudo destinará para exportación, ambos datos influyen al volumen de producción total esperada en todo el país (hoy incluye a privados y a PEMEX). Pregunta: ¿La SHCP tiene contemplado eliminar a las exportaciones como objetivos en el presupuesto? Respuesta es: No.
En 2023 a 2028 contempla, exportar entre 700 a 800 mil barriles diarios, y lo cual sugiere que solo exportaríamos a nuestro socio comercial EUA, dejando a un lado mercados de Europa y Asia, derivado que pretende producir no más de 2.1 MBD en 2028. Mañana continuaremos con otras dos acotaciones del por qué México no puede dejar de exportar crudo. (Grupo Caraiva– Grupo Pech Arquitectos)