Juventud, diezmado tesoro

Este lunes 12 de agosto se celebró el Día Internacional de la Juventud, fecha promovida por la ONU

Este lunes 12 de agosto se celebró el Día Internacional de la Juventud, fecha promovida por la ONU, con la cual se busca promover que los jóvenes participen y sean incluidos en todos los ámbitos de la sociedad, mejorado sus oportunidades, condición y nivel de vida. La juventud identifica el periodo de vida entre la infancia y la adultez; de los 12 a los 29 años; no obstante, también tiene que ver con características propias tan heterogéneas e innumerables. Cada sociedad tiene su determinado tipo de jóvenes, variando según las regiones e incluso dentro de un mismo país, por diversos factores: hereditarios, clima, estado de salud, alimentación, clase social, nivel de actividad física o intelectual, cultura, educación, etc. Con el modo de comportarse y actuar, en la juventud se establece la identidad; además se definen todas aquellas proyecciones, expectativas y sueños que el individuo tenga para empezar a moldear su futuro. En este momento se construye la propia conciencia, se asumen responsabilidades y se toman decisiones, adquiriendo madurez emocional, intelectual y social.

Actualmente, como en la mayoría de los países en desarrollo, el mundo cuenta con la población juvenil más grande de la historia. Según datos de la ONU, hay cerca de 2.5 mil millones de jóvenes entre 10 y 29 años. Casi un tercio de la población mundial. La mitad de quienes habitan el planeta tiene 30 años o menos, y se espera que acumulen el 60% a inicios de la próxima década. Muchos de ellos viven en zonas de conflicto, otros se encuentran en dificultades para el acceso al mercado laboral, educación o vivienda, y muchos más en situación de pobreza.

En México, 3 cada 10 personas son adolescentes y jóvenes, pero para mediados de siglo sólo un poco más del 20% será población joven. Hoy día residen en el país unas 45 millones de personas entre 12 y 29 años de edad. Sin embargo, según el CONEVAL y ONG´s, alrededor de 20 millones de éstos jóvenes viven marginados en zonas rurales y urbanas, en la pobreza, exclusión y precariedad laboral. Cifra cercana a la mitad del total de jóvenes mexicanos. De ellos, cerca de 7 millones estarían fuera de la escuela, sin trabajo y con rezago educativo. Habría más de 5 millones de personas excluidas sin poder buscar trabajo por realizar labores de cuidados no remuneradas, más del 90% serían mujeres. Al menos otros 10 millones de jóvenes en trabajos precarios con el salario mínimo sin seguridad social. Y finalmente, cerca de 4 millones de estudiantes en familias de muy bajos ingresos, acumulando desde la cuna desventajas relacionadas con la pobreza, la exclusión y las carencias.

La desnutrición en los primeros años de vida genera un deficiente desempeño educativo en la educación básica, por lo que muchos jóvenes no logran concluir con éxito el bachillerato ni aspiran a una carrera profesional. Además, si son mujeres en familias tradicionales, machistas o en condiciones socioeconómicas adversas; les dirán que su lugar está en las labores domésticas, en la maternidad y cuidado de los hijos, ni siquiera podrán salir a buscar trabajo.

Este infortunio disminuye e inmoviliza a la más grande fortaleza nacional, los jóvenes y el capital humano que representan, la oportunidad generacional para salir de la pobreza y el subdesarrollo. De acuerdo con el último Informe de Movilidad Social en México, casi la mitad de las personas que nacen en la pobreza permanecerá en la misma condición, y apenas una cuarta parte logrará superarla. En los últimos 25 años, el porcentaje de personas que viven en algún nivel de pobreza no se ha reducido sustancialmente, y pareciera crecer en algunos estratos poblacionales.

Sin políticas publicas certeras que potencien y aprovechen este invaluable capital humano y económico, ni proyectos socioeconómicos transexenales de gran calado que diversifiquen, amplíen y mejoren sus oportunidades de salud, educación y empleo; la juventud mexicana actual estaría condenada a ser la más pobre y desperdiciada entre las últimas generaciones. ( drulin@datametrika.com/ Investigador Titular, UJAT/Director General, Datametrika Co.)