A fuerza de aplazar sus definiciones para 2024, Movimiento Ciudadano ha dejado un vacío que ocupó, ni tardo ni perezoso, el presidente López Obrador.
El Presidente fue a Monterrey y les dijo al gobernador Samuel García y al alcalde Luis Donaldo Colosio que le gustaban para candidatos presidenciales para MC.
Se los dijo a ellos, y a toda la prensa y a todos los rumorólogos del país.
Lo que dijo es que tiene in pectore una abierta simpatía por esos candidatos para ese partido.
Como el pecho del Presidente no es bodega, y nada guarda para sí, pues le dijo a quien quiso oírlo que los punteros en sus afectos para MC son el gobernador y el alcalde neolonitas.
Nadie sabe si esto vale como el beso del Diablo o como el beso del Futuro, pero es claro que deja su marca en el río sin fin de cábalas y adivinaciones a que suele reducirse nuestro análisis político.
El Presidente fungió como estratega electoral amistoso de quienes, en principio, son sus opositores, pues, mientras no haya hechos en contrario, MC es un partido de oposición.
Es un partido con poca intención de voto, pero con algunos de los políticos jóvenes más prometedores del país y otros, veteranos, de los más experimentados.
Si MC quiere mantenerse independiente, claro y a salvo de especulaciones, su proceso hacia el 24 debe deslindarse de la intromisión corcholatera del Presidente y poner su decisión interna, claramente, al margen del juego presidencial.
Digo intromisión corcholatera porque el Presidente llama corcholatas a los candidatos que impulsa en su propio partido y supongo que pensará lo mismo de los candidatos que quisiera designar en MC.
MC no tiene un buen pronóstico electoral si no se alía con alguien y va solo, como quiere ir, a las elecciones de 2024.
Puede, en cambio, aliarse a la oposición y fortalecer las posibilidades de una victoria de ésta, o ayudar, al menos, a que haya una elección más competida, que reequilibre la democracia mexicana.
Si no la hora de escoger candidatos para el 24, lo que sí llegó para MC es la hora de deslindarse de los afanes corcholateros expansivos de Palacio.