ME PARECE QUE ES ATINADO el concepto de Humanismo mexicano, como distintivo de políticas públicas. Y mejor en la educación. No porque el humanismo precise definiciones geográficas o acote a una cultura en específico dentro de fronteras políticas o a ese mosaico cultural que define a la población de nuestro país, sino porque enfatiza la puesta en práctica de una línea educativa con características de raigambre ampliamente cultural mexicana y señala desde el nombre el destino, el enfoque de dicha línea, dónde se van aplicar ese conjunto de ideas.
LO ANTERIOR SE ESPECIFICA porque el humanismo como tal realmente no tiene fronteras, corresponde a una visión vanguardista de la existencia de la especie, y se manifiesta sea en grupos o en lo individual, donde quiera que se encuentre este, sea aislado o hasta la parte más lejana en de donde nosotros nos encontramos. El humanismo es el reconocerse como parte de una especie y cuidar el entorno de la naturaleza en la que forma parte. Todo lo humano en búsqueda del bien de la naturaleza, porque forma parte de ella.
ENFOCÁNDOLO A NUESTRO PAÍS, no hay diferencia alguna entre el humanismo en el concepto de origen, ni tampoco en su aplicación o entendimiento en otras culturas. Se coincide en lo esencial: en el bien estar y en el bien ser del hombre. Humanismo debe imperar en la política, en la educación, en el comercio, en el servicio público, en el dirigir y acatar, en las oportunidades y en el compromiso. Precisamente porque humanismo no es moda (no lo debe ser), sino es el imperativo en todo lo que el ser humano realiza, ya como modo, sin necesidad de norma. Y se refiere no solo al trato de un ser humano con otro o con otros, sino en el trato con las plantas y los animales, y en general con todo lo que concierne a la naturaleza, en el cuidado de nuestros parques, nuestros cuerpos de agua, etc.
EL ARTE ES EN SÍ MISMO, humanista. La política en su ideal lo es (muchas veces no en su práctica). La educación por sí debe serlo o lo es y más la educación pública: se debe educar para la libertad. Humanismo es no buscar la competencia sino la colaboración. Es buscar el trabajo en equipo, no el individualismo. Humanismo es compartir lo que se tiene. Es no discriminación.
11. Bien su puede entrar a la investigación sobre orígenes del concepto humanista. Y remontarnos al origen de la palabra, quién la utilizó primero y su planteamiento filosófico y religioso. No está nunca de más, dependiento del objetivo del planteamiento. Lo cierto es que vemos y sufrimos desigualdades, problemas sociales, suicidios de adolescentes, corrupción, inseguridad, desapariciones forzadas, feminicidios. Humanistas no son quienes perpetran todos esos delitos. Humanistas no son quienes se comportan con indiferencia ante dicha problemática. Humanistas no son quienes esquivan responsabilidades. No son quienes calumnian e injurian. Humanismo es todo aquello que tiende a construir en todos los ámbitos (casa, oficina, escuela, vecindario) una mejor conciencia social, de paz y armonía, de aceptación de nuestras diferencias. (FIN)