En lo relativo al caso de la Ministra Yasmin Esquivel Mossa, por un presunto plagio de la tesis que como requisito elaboró dicha funcionaria judicial para presentar examen profesional y obtener el título de Licenciada en Derecho en la UNAM, parecería que en vez de que aflore la verdad, más se enreda el asunto dando la impresión de que algo anda mal.
Por un lado, en las últimas horas del 2022 trascendieron a la opinión pública dos versiones encontradas sobre el tema: La primera, la de la Ministra quien sin mostrar pruebas, aseguró que el otro alumno, implicado en el caso, aceptó haber tomado partes de su tesis, reconocimiento que según aquella hizo ante notario público (Animal Político 30/12/2022); sin embargo a las pocas horas, el abogado Edgar Ulises Báez, autor de la tesis envuelta en la polémica, aseguró que su escrito es el original y desmintió que haya sido llamado a testificar sobre el proceso de elaboración del documento (Proceso 31/12/2022).
Y a escasas horas de concluir el 2022, el 31 de diciembre, Enrique Graue, rector de la UNAM, luego de asegurar que resultaba evidente la existencia de un plagio, con base en el alto nivel de coincidencias, entre la tesis de la citada ministra y la del estudiante de derecho Edgar Ulises Báez Gutiérrez, emitió un comunicado a la Comunidad Universitaria y a la Sociedad Mexicana, en el que puntualizó entre otras cosas lo siguiente:
"La Universidad Nacional Autónoma de México goza de la confianza de la sociedad mexicana y ello es una de sus principales fortalezas. La verdad está en la esencia de la UNAM y constituye un valor fundamental de nuestro actuar y de nuestro quehacer. Por estas razones, en mi calidad de Rector, no acepto que derivado de disputas ajenas se vulnere el prestigio y la honorabilidad de la Universidad."
Así las cosas, por una parte si vemos lo que el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha señalado respecto de las cualidades que debe tener un Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, tales como la honestidad y rectitud, y por otra, lo que el rector de la UNAM de manera puntual señala en torno a que la verdad está en la esencia de la Máxima casa de estudios, entonces, ello –sin lugar a dudas-- pone en serio brete no solo a la Máxima Casa de Estudios sino a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en particular a los ministros que, con excepción de la citada Yasmín Esquivel, lo integran.
Esto es así y como dice el mandatario tabasqueño "no me vengan con que la ley es la ley", pues si lo que dice Enrique Graue en torno a que la verdad es la esencia de la UNAM, y que el prestigio de ésta no debe ser vulnerado por disputas ajenas, sin duda será interesante conocer el pronunciamiento final que, respecto de esa cuestión, emita dicha institución educativa.
Pero también, es un trompo a la uña para la SCJN, cuyo quehacer ha sido reiteradamente cuestionado por el titular del Ejecutivo Federal, bajo el argumento de que algunos de sus miembros están afectados por el síndrome de la corrupción.
Pero en ese sentido, si bien Yasmin Esquivel Mossa, ha tratado de demostrar que ella no incurrió en plagio alguno, e incluso tal vez pretendiendo desviar la atención ha señalado que por ser mujer no quieren que presida la Suprema Corte de Justicia de la Nación, parecería que algo anda mal en ese asunto.
Luego, será interesante ver en qué sentido votarán los Ministros de la SCJN, este lunes 2 de enero, al momento en que se realice la elección de su Presidente.
Esto es si brindarán su aval para que la Ministra Yasmin Esquivel –pese a estar en entredicho la originalidad de su tesis-- cumple con los atributos suficientes para ocupar la presidencia del máximo tribunal del país o en todo caso la sociedad mexicana podrá constatar de qué está hecho el Poder Judicial de la Federación. (mail altar_mayor@yahoo.com.mx)