ADOLESCENTES Y CONSUMO DE ALCOHOL

Alrededor de un tercio de los estudiantes de último año de secundaria en los Estados Unidos han tomado una bebida alcohólica en el mes pasado


El consumo de alcohol no es un problema de adultos solamente. Alrededor de un tercio de los estudiantes de último año de secundaria en los Estados Unidos han tomado una bebida alcohólica en el mes pasado. El mejor momento de comenzar a hablar con su hijo adolescente sobre las drogas y el alcohol es ahora. Los niños ya de la edad de 9 años pueden sentir curiosidad acerca del consumo de alcohol y pueden probarlo.

Cuando un hijo comienza a beber antes de los 15 años, es más propenso a convertirse en un bebedor a largo plazo o en un bebedor problemático. Un problema de bebida en adolescentes significa que ellos: Se emborrachan, tienen accidentes relacionados con el consumo de alcohol, se meten en problemas con la ley, su familia, los amigos, el colegio o las parejas en las citas debido al consumo de alcohol

Al no decir nada, usted está diciendo algo. No decirle nada a sus hijos acerca de la bebida puede darles el mensaje de que el consumo de alcohol en adolescentes está bien. La mayoría de los niños deciden no beber porque sus padres hablan con ellos al respecto. La mejor manera de que sus hijos se sientan cómodos hablando con usted acerca del consumo de alcohol es ser honesto y directo.  Coméntele a su hijo cómo se siente usted respecto a la posibilidad de que consuma alcohol. Una vez que usted haya empezado a hablar con su hijo adolescente, siga trayendo esto a colación en momentos en que estén hablando sobre asuntos relacionados.

La pubertad y los años de la adolescencia son un tiempo de cambio. Sus hijos pueden tener una sensación de libertad que nunca habían tenido antes. Naturalmente son curiosos y quieren explorar y hacer las cosas a su manera. Pero la presión por adaptarse podría dificultarles el hecho de resistirse al alcohol si parece que todo el mundo lo está probando.

Aliente a su hijo a hablar con usted acerca del consumo de alcohol. Permanezca calmado al escuchar y trate de no juzgarlo ni criticarlo. Bríndele comodidad para que hable honestamente. Hágale saber a su hijo que usted comprende que correr riesgos es una parte normal del crecimiento. Recuérdele que tomar alcohol conlleva riesgos serios y haga énfasis en que nunca debe beber y conducir ni viajar con un conductor que haya estado bebiendo.

Por otro lado, el consumo peligroso o abuso de alcohol en el hogar puede generar a los mismos hábitos en los niños. Los niños se vuelven conscientes de los patrones de consumo de alcohol de sus padres a una edad temprana.

Los niños son más propensos a beber si hay conflictos entre los padres o tutores, los padres están teniendo problemas financieros o están estresados por el trabajo, el consumo excesivo ocurre en el hogar o el hogar no se siente como un lugar seguro por otros motivos

Si el consumo problemático de alcohol o el trastorno por consumo de alcohol es algo familiar, es muy importante hablar con su hijo. No guarde secretos. Su hijo debe conocer cuáles son los riesgos del consumo de alcohol. Hable honestamente sobre cómo la bebida ha afectado a los miembros de la familia y hable respecto a los efectos del alcohol en su propia vida.

Dé un buen ejemplo bebiendo de manera responsable. Si tiene un problema con el consumo excesivo de alcohol, tome la decisión de conseguir ayuda para dejar de beber.

( Psiquiatra/Paidopsiquiatra)