Parte 4: Conclusiones.
Esta colaboración la dividí en cuatro partes, en la primera, hemos dado nuestra visión de la Corrupción, especialmente la Financiera, y sus raíces muy profundas en cómo fue formado el ser humano (y hasta otras especies), dispuesto a traicionar lo social por lo particular, y la palabra empeñada por el beneficio indebido. Estas características humanas han sido explotadas por los pocos beneficiarios del Modelo Imperial que también resumimos. Conforme se vaya implementando el Modelo Democrático, la Corrupción se ve como tal, no algo divinamente impuesto sobre un pueblo inerme, sino algo que se puede desterrar del Ejercicio Fiscal.
En la segunda parte del artículo, exploramos la historia reciente de cómo se ha concebido la Corrupción, y sus antídotos institucionales, básicamente, la Contraloría del Ejecutivo y la Contaduría Mayor de la Legislatura. Definitivamente, ha habido avances sobre la situación que prevalecía antes de estas reformas institucionales, pero hay que hacer más, ya que la dependencia de ambas instituciones es con el Ejecutivo, no el Pueblo en forma más directa, y así el vigilante es nombrado por el vigilado, limitando la efectividad de las instituciones a las corruptelas no autorizadas y excluyendo por completo lo que el Ejecutivo no desea transparentar. Un primer paso sería liberar a ambas instituciones de su dependencia para poder trabajar con todo el Ejercicio Fiscal en forma pareja, detallada y pública, ya que tratamos de recursos públicos, no de ningún gobernante.
En la tercera parte del artículo, examino el papel crítico de la disponibilidad de información relevante para la Transparencia. De nuevo, aquí hay mucho qué hacer para que rinda el recurso público. La Economía no jala bien con desperdicios, y de ellos uno de los peores es el robo del Recurso Público por muchas razones: Primero, porque cuesta mucho esfuerzo juntar esos recursos; y segundo, porque son recursos de la sociedad dedicados a su servicio, especialmente sus miembros más necesitados, en donde las ventajas económicas y sociales para el resto de la sociedad son inmensas, por los altos multiplicadores de convertir pasivos sociales en activos. Todos ganan, menos los pocos corruptos. Es lo más democrático que hay.
Los pueblos son sabios y han luchado siglos para llegar sus vanguardias en nuestros tiempos al Modelo Democrático, que atiende a ambos aspectos señalados de la Corrupción Financiera Gubernamental. Primero, como ya hemos señalado, el Pueblo nombra al Contralor en forma directa y le pone una serie de requerimientos que transparentan sus decisiones y acotan seriamente su espacio discrecional. O sea, hay un verdadero control de los recursos públicos, con muchísima transparencia. No es perfecta la solución, pero es un gran avance sobre lo que ofrece el Modelo Imperial.
Segundo, es importante avanzar hacia los detalles del Ejercicio Fiscal. Doy un ejemplo de lo detallado que pudiera ser el Ejercicio Fiscal, por nivel de gobierno en una sola página, como es del Estado de Nueva York:
https://wwe2.osc.state.ny.us/transparency/LocalGov/LocalGovIntro.cfm
En tercer lugar, el recurso mismo se transparenta mediante el internet, cheque por cheque, y factura por factura, con un grado extremo de detalle. Si el Gobierno del Estado de Tejas gasta $16.40 en enviar un paquete de mensajería, a los pocos días el Mundo entero pueda saber del hecho incluyendo la fecha, la oficina involucrada, el número de cheque, el banco, el proveedor del servicio, y lo que Usted quisiera saber del trámite. No hay datos escondidos. Puede ser que algunos trámites no están transparentadas al mismo grado, por los pocos y limitados secretos de Estado que pudieran ser espacios limitados de corrupción, pero casi todo está en el internet. Visiten su sitio en internet y van a ver que cuenta con casi 600 páginas de Excel por mes de su Cuenta Pública, cada línea siendo un gasto público. Algunos de los condados, como Snyder en Tejas, pueden ir por el 100% de su gestión puesto en internet y también sus ingresos por fuente individual, más sus contrataciones y situación de Deuda. No hay nada secreto en el Modelo Democrático ya que el principio es que los recursos son del pueblo y los gobernantes ejercen esos recursos a favor del pueblo y desean que el pueblo vea los detalles y participen con su aprobación o corrección en ese ejercicio democrático.
México ya se está encaminando rápidamente hacia el Modelo Democrático. Escribo este artículo para plantear, sin que nadie me lo haya pedido, lo que, a mi juicio, es un buen camino adelante y que ayudaría muchísimo en facilitar la Vida Nacional, y consolidar la participación, y hasta liderazgo, de México dentro de ese Modelo. (El autor es Doctor en Economía, especialista en planeación y finanzas, colaborador de PRESENTE)