El equipo del Senador Ovidio Peralta Juárez, ha intensificado los trabajos de organización del cuarto informe legislativo del ahora coordinador en Tabasco de la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum.
Prevista para los primeros días del mes de septiembre próximo – debe caer en domingo-, se prevé ahí la visita a la entidad – en su calidad de invitada especial- de una de los prospectos visibles para buscar la candidatura presidencial.
La definición de Ovidio Peralta no es fortuita; desde Tecoyotitla 100 en la delegación Álvaro Obregón de la Ciudad de México, se ha iniciado una cruzada política que permita a Senadores por Morena, apoyar desde sus estados el camino de la jefa de gobierno en el hándicap interno.
Pensar en que la determinación del grupo del Senador May por definir estrategia de movilidad y posicionamiento de cara a la sucesión del 2024 es fortuita, pecaría de ingenuidad.
May Rodríguez y Octavio Romero, mantiene una alianza intacta desde el éxodo por la democracia de 1994, misma que sobrevivió al desprendimiento del PRD y su transición a Morena. La movilidad de los llamados “puros” en el partido del presidente, además, no es exclusivamente en el sureste.
Desde los tiempos del “solaztequismo”, esta izquierda “andresmanuelista” toma definiciones y cierra filas una vez que surgen los candidatos oficiales, siempre, bajo la tutela del inquilino de palacio nacional.
Si bien el distanciamiento entre Javier May y el grupo gobernante se hace evidente después de la elección de la dirigencia partidista, el proceso de “contención” política de aquí a la definición del abanderado presidencial y del candidato al gobierno de Tabasco, tiene un común denominador: Andrés Manuel López Obrador.
Para nadie es un secreto, que la 4T se sostiene de la movilidad y el activismo de los “puros” por un lado – a ras de tierra- y de las alianzas políticas del Presidente con los grupos de poder en el país por el otro, los “neomorenistas” Pues. Este mecanismo le ha funcionado al gobierno de la transformación por casi cuatro años.
En este contexto, se entendería el ¿Por Qué? hasta el viernes 19 de agosto, el proceso de elección de la nueva dirigencia en Morena, parecía planchado. Tey Mollinedo en la dirigencia y José Ramiro López Obrador en la Presidencia del Consejo Político Estatal.
El equilibrio de fuerzas entre “puros” y “neomorenistas”, parecía la solución más práctica para evitar el surgimiento de aldeas en el partido del presidente.
Para el sábado por la tarde, las alertas se encendieron luego de surgir la postulación de Lorena Méndez Denis, actual diputada federal, como propuesta para la dirigencia. La mención para Morena Tabasco, se mantuvo a favor de Tey Mollinedo Cano y como contrapropuesta, surgió el nombre de César Raúl Ojeda Zubieta.
El rompimiento de acuerdos hizo todo lo demás. ¿Octavio y May, saben algo que nosotros no?
Kybalión.- En el año 2000, seguidores y grupo político de Arturo Núñez, se enfrentaron a Roberto Madrazo Pintado, como aspirante presidencial apoyando abiertamente a Francisco Labastida Ochoa.
Madrazo quién había pedido licencia como gobernador perdió la interna, pero regresó a Tabasco para ocupar de nuevo el cargo y se sacó de la manga la candidatura al gobierno de Manuel Andrade Díaz, para pasarle encima a Núñez Jiménez.
¿Se descartaría un efecto MAD en Tabasco en 2024?
¿Otro "Labastidazo" cambiaría la ruta en el trópico?
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