En los tiempos de Jesús Madrazo Martínez de Escobar, cómo efímero dirigente del PRI en Tabasco, surge la figura en los recovecos del sistema de la temible “Abeja Africana”, operador político que no solo aglutinó poder, sino se destacó como quien detrás el trono, hacía y deshacía candidaturas durante el gobierno de Manuel Andrade Díaz.
Joel Cárdenas Arroniz, solo había destacado como secretario del ayuntamiento de Nacajuca en los tiempos de Enrique González Pedrero, desapareciendo por más de una década y reapareciendo con el cambio de siglo en la sede del poder legislativo, allá por 1999, con un “enjambre” de líderes campesinos “destapando” a Manuel Andrade como candidato al gobierno del estado.
Eran los tiempos que generacionalmente, la “jimenada” se disputaba la gubernatura: Arturo Núñez Jiménez por un lado y Pedro Jiménez León por el otro; hasta que Roberto Madrazo Pintado, les hizo la maldad.
Por ello, la “lealtad” de “la abeja” con MAD, le generó amén de liderazgo, fortuna. Su última aparición en temas electorales – para después desaparecer de nuevo- lo realizó en las elecciones del 2012, cuando su “enjambre” operó a favor de Arturo Núñez Jiménez y el PRD en las elecciones de ese año.
En los tiempos de Andrade, el PRI operó con dirigentes emergentes. El “gringo” Rosas, con debut y despedida; posteriormente a la salida de Jesús Madrazo por el descalabro electoral del 2003, Martha Andrade navegó en calidad de dirigente por espacio de tres años.
En todo ese tiempo, el PRI caminó en 16 de septiembre de manera simbólica, casi administrativamente, porque el tema electoral se marcaba desde la Quinta Grijalva y teniendo como testigo a Joel, la temible “abeja africana”.
Los que entraban a la Quinta con él, eran cuasi candidatos. Los que no, salían con nombramiento de funcionarios en la bolsa. Las “dirigencias paralelas” impulsadas desde el poder, no es tema novedoso pues.
Llama la atención sin embargo, la versión “abejuna” en tiempos de la 4T. Desde el fatídico “sábado negro” del 21 de agosto en la sesión del consejo político de Morena que prosiguió con los descabezados en el gabinete, la versión de una dirigencia paralela en Morena ha generado inquietud en la sede guinda.
Sin “operación cicatriz” de por medio, surgió el pasado fin de semana la “Fundación Somos Tabasco” que antes del 21 de agosto, se había registrado como “Fundación Chontalpa” y en la que liderazgos regionales de Morena encabezados por Jesús Selván García, se están dispersando por todo el estado para promover la imagen de la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum.
Los llamados “fundadores” de Morena, continúan pues con el hacha desenterrada. En los últimos dos años, Morena mantuvo dos dirigencias en la entidad con Pedro Hernández Jiménez por un lado y Jesusita López Garcés por el otro.
Tey Mollinedo Cano, lleva la bandera oficial de Morena en esta ocasión, mientras por la disidencia, “Chucho Selván” arrancó ya desde la Chontalpa su “operación gallina”, bajo la figura de apoyo alimentario – con una de doble pechuga- para los que menos tienen.
Es sí, la única gallina que para su distribución, requiere de la gestión de coordinadores regionales, responsables de localidad, jefes de sector y activistas sociales. Algo así como los molinos y los triciclos en los tiempos de la abeja africana.
¿Qué cosas no?KYBALIÓN.- Acostumbrados a plantones de protesta, llamó la atención de propios y extraños la presencia en las afueras del poder legislativo de habitantes de la Ranchería Buena Vista que en esta ocasión no reclamaron.
Los morenistas de “a pie” agradecieron con pancartas al legislador Jesús Hernández Díaz, por las gestiones realizadas en el sector “La Taratana” en materia de agua potable. La mujerada se enteró que el legislador cumplía años y lo celebraron a su estilo.
Temporada de cosecha para el diputado.