Muchas especulaciones después, el gobernador electo Javier May dio a conocer al equipo convocado a la gran responsabilidad de colaborar con él en el gabinete. Un equipo en el que, tal como se comprometió, hay paridad de género. Así también hay experiencia y figuras con trabajo reconocido tanto en el ámbito local como nacional.
A Javier May se le ha criticado mucho el carecer de un título profesional, no obstante, es imposible de negar que tras una vida de ejercicio, se ha hecho todo un profesional de la política, entendida en el mejor sentido de la palabra. Esto es, ha dedicado la mayor parte de su vida y actividades en asuntos que son de interés público, que están relacionados con el ejercicio del poder. Al principio, como parte del movimiento que criticó el ejercicio del poder en el pasado, ahora, ese mismo movimiento social lo ha llevado al más honroso cargo de Tabasco después de haber ejercido como funcionario del gobierno federal en dos de los encargos más importantes: en la Secretaría de Bienestar y en el Tren Maya.
Si entonces la formación universitaria no fue un obstáculo para sacar adelante esos encargos tan sensibles en el primer episodio de la cuarta transformación, como gobernador de Tabasco tampoco lo será, especialmente porque May Rodríguez no llega solo, ni llega únicamente sostenido por la avasalladora mayoría de quienes lo eligieron en las urnas. Llega, como bien se dio a conocer, acompañado por un grupo de profesionales experimentados, cada uno con el compromiso de encabezar en sus despachos y áreas de gestión una administración eficiente.
Más allá de las tareas que hay que hacer, que año con año se llevan a cabo conforme el calendario de la administración pública, el compromiso es resolver más con menos, para lo cual la inventiva y capacidad de establecer alianzas que permitan resolver sin necesariamente tener dinero (o con el mayor cuidado de los recursos posible, como en los tiempos en que eran oposición). Desde luego, las líneas generales están marcadas por la adhesión ideológica y política a lo que representa el proyecto de la Cuarta Transformación a nivel nacional, que encabezará Claudia Sheinbaum.
Por cuestiones puramente estacionales y climáticas, entre las primeras responsabilidades de Javier May, junto con los alcaldes y alcaldesas electos, está el atender la temporada de lluvias, que en Tabasco no deja de representar un desafío por cuestiones históricas de asentamientos populares, rezago en la infraestructura y crecimiento desorganizado de la población.
Sin embargo, hay importantes retos más de fondo también en el mediano plazo. Empezando por la Reforma Judicial que se debate a nivel nacional, que en Tabasco tendrá una edición el 27 de julio próximo. May Rodríguez ha manifestado que, tal como se prevé que se haga en el ámbito federal, en la entidad también serán los ciudadanos quienes elijan a los jueces y magistrados, seguramente con transformaciones a las leyes que hoy dan forma al Consejo de la Judicatura Estatal. Habrá que estar atentos y participativos para evitar que la reforma local sea una simple copia de la que se haga a nivel federal, especialmente porque representa una gran oportunidad de atender las causas materiales, organizacionales y administrativas de la dilación de la justicia. Para nadie es un secreto que los juzgados a menudo carecen de papel y hasta se quedan con frecuencia sin luz, lo que hace imposible atender al público.
Otro muy sentido tema de fondo pendiente, en el que la cooperación con el gobierno federal es fundamental, es el de la atención a la salud, con la transición en curso a la federalización de los servicios. La visita de Zoé Robledo, director general del IMSS, a Tabasco la semana pasada, en la que dialogó ampliamente con Javier May, da cuenta de que el gobernador electo entrará en funciones perfectamente informado de los avances y de los pendientes que hay que atender con el fin de que ese proyecto se concrete cuanto antes, para bien de la población.
Opiniones sobre los integrantes del gabinete aparte, lo que es un hecho es que los equipos estarán trabajando en la entrega-recepción estos dos meses, porque no hay plazo que no se cumpla. Las funciones inician en octubre formalmente, pero los trabajos están en marcha.