La pregunta es ¿cómo llegamos a esto? Esa es una pregunta que, seguramente, es muy difícil de contestar: ¿Cómo llegamos a esto?
También es difícil encontrar a alguien que, con honestidad, pueda darnos una respuesta convincente.
Muchos hablan, opinan, escriben, comentan, se quejan, critican, utilizan estribillos ya conocidos y frases desgastadas; todos, como si estuviéramos en un manicomio, viendo pasar el tiempo sin que lo que está ocurriendo parezca realmente importarnos.
Cada quien en su mundo. Algunos, quizá con el Jesús en la boca; otros, rogando al cielo no toparse en el camino con un suceso que nos impida regresar con bien a nuestro aposento; las autoridades hacen señalamientos sobre presuntos actores de lo que está sucediendo, sin que se sepa a cabalidad qué hay y quiénes están detrás de lo que pareciera ser un verdadero des... papaye.
Decimos esto, cuando un día sí y otro también, sin importar la hora, lo mismo da que sea de madrugada, de noche, de tarde, de mañana, en que los villahermosinos como pan de cada día, nos enteramos de hechos violentos y víctimas de los mismos, personas fallecidas aquí y acullá.
Todo ello, como si de pronto en este bello y otrora apacible Estado nos hubiera caído una peste.
Peste que por más que de manera oficial se hable de esfuerzos que se dice van encaminados a restablecer la paz, para lo cual, como en el pasado, se ha tenido que recurrir a los elementos castrenses de la Secretaría de la Defensa Nacional antes SEDENA ahora Defensa, la Secretaría de Marina (SEMAR) y la Guardia Nacional (GN), ante la complejidad del problema de la inseguridad.
Lo anterior ante la realidad que no se quiere reconocer, atinente a que los cuerpos de seguridad y fiscalías de los Estados, hace tiempo han sido rebasados, igual que algunos gobiernos locales y municipales por la delincuencia organizado, resultado tal vez de una ineficaz falta de coordinación.
¿Cómo llegamos a esto? Duele decirlo, Tabasco, Villahermosa su capital no lo merece, de manera especial, no lo merecemos los tabasqueños.
Alguien, muy jactancioso y horondo, alza la voz para decir: si no pueden renuncien.
Que renuncie quién. Si con renunciar no se resuelve nada, porque quien llega, al rato dejará el cargo y será ocupado por otro y así sucesivamente, y el problema sigue.
Tampoco lo resuelve estar ocupados en andar lanzando culpas o dimes y diretes.
Lo hemos dicho otras veces, es hora de trabajar, de sumar voluntades, esfuerzos.
Pero hacerlo en serio, ya basta de confrontaciones, hay que dejar la grilla por un buen rato.
Tabasco y sus habitantes tenemos hoy un problema delicado y de mucha complejidad.
Es urgente poner manos a la obra. La tarea no es nada fácil, requiere de la participación de todos.
Y debe admitirse: el problema no se va a resolver con que el gobierno federal mande más elementos de la Defensa, la SEMAR y la GN, como se ha hecho en varias regiones del país.
Estamos ante lo que ya es un verdadero Talón de Aquiles que, como un cáncer, poco a poco fue permeando en detrimento de la paz social.
Si no pueden que renuncien, tampoco. Mejor pedir, que se demuestre, con hechos, que se está dando solución al problema.
Entrelíneas...
El próximo 24 de febrero será la elección de la nueva dirigencia del Colegio de Ingenieros Civiles de Tabasco (CICT) y todo parece indicar que, de las 2 planillas (verde y blanca), la primera es la que se perfila como la mejor posicionada rumbo a la victoria. Dicha planilla verde está encabezada por el ingeniero Ricardo Espino García cuya propuesta se sintetiza en el lema "Unidad y Trabajo" propuesta encauzada a fortalecer la representatividad de esa cámara empresarial una de las más importantes del Estado.*** Estará hoy por Tabasco la secretaria de Bienestar Federal, Ariadna Montiel Reyes quien junto con el gobernador Javier May Rodríguezpresidirá un evento –a la 1 de la tarde– en la nave 3 del parque Tabasco donde se entregarán las primeras tarjetas de Apoyo Social a mujeres tabasqueñas de la tercera edad.