Los principales indicadores de mercados bursátiles en Wall Street mostraron alarmantes tendencias a la baja en la última semana de febrero 2021. El temor inflacionario y el fin de la política expansiva de la Reserva Federal (Fed) que impulsó las ganancias en indicadores durante 2020, hicieron caer las principales acciones de empresas en tecnología. En contraste, el temor de que una política fiscal y monetaria flexible aviven la inflación elevaron los rendimientos de bonos a 10 años a su nivel más alto desde 2020.
Por la mañana del martes 23 de febrero 2021, el Nasdaq Composite cayó 395 puntos, o 2.9%, sumándose a pérdidas de aproximadamente 2.5% en lunes anterior. El S&P 500 disminuyó 1,1%, mientras que el Dow Jones Industrial Average, que alberga una mayor concentración de acciones maduras bajó 0,5%, o 154 puntos, a 31.368 puntos.
Al interior de los indicadores, una de las caídas más dramáticas se dio en el sector de automóviles eléctricos con la caída de 11% en las acciones de Tesla (NASDAQ: TSLA), que por mucho tiempo estuvo valuado en niveles muy altos. El sector tecnológico también fue de los más golpeados de Wall Street, donde Apple (NASDAQ: AAPL), Amazon.com (NASDAQ: AMZN) y Microsoft (NASDAQ: MSFT) perdieron 3.4%, 2.0% y 1.7%. Asimismo, las acciones de Shopify (NYSE: SHOP) reportaron una caída de 7.8% tras anunciar la colocación de 1,18 millones de nuevas acciones.
Las pérdidas en Wall Street se dieron después de que el rendimiento de los bonos del tesoro a diez años subiera 1.37%, preocupando a diversos inversores por el rápido ascenso en los rendimientos que hace menos atractiva la inversión bursátil. Así, las expectativas de tensiones inflacionistas aumentó la rentabilidad de la renta fija de los bonos a diez años y limitó ganancias históricas en principales indicadores en Wall Street.
En contraste, Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal (Fed), en su primer día de testimonios en el Congreso sobre el estado de la economía, aseguró mantener tasas bajas hasta que la economía se acerque al pleno empleo y aseguró que la inflación es "suave" todavía. En el tono de sus declaraciones se dejó entrever en la Fed poca preocupación por el momento ante el tema inflacionario y confianza en el repunte de la economía de Estados Unidos posterior a la pandemia.
Así, las fuertes pérdidas reportadas en los indicadores de Wall Street, junto con el aumento de los rendimientos en bonos a diez años del tesoro estadounidense, están ligadas al temor inflacionario. Sin embargo, las declaraciones de Powell ayudaron a calmar el temor de un posible fin a las políticas expansivas de la Fed en el corto plazo.