Venezolana oculta estar contagiada de coronavirus a su familia, ¡Mira lo que les sucedió!

Pasaron tres días luego de la prueba PCR, donde confirmó su resultado positivo

El 17 de diciembre, la señora presentó indicios, por lo cual acudió sola a un centro de salud para hacerse la prueba de coronavirus. Ha sido entonces una vez que supo que era un caso positivo, tomó la decisión de guardar silencio. 

Pasaron tres días luego de la prueba PCR, donde confirmó su resultado positivo. Más adelante se dirigió a consulta con un doctor privado, a quien además le ocultó la información.  

Verónica contó a su familia sobre su estado de  salud que estaba afectada por una intensa gripe, por lo cual José Antonio, su marido, asistió a una junta el 27 de diciembre, sin sospechar que podía ser portador de covid-19.  

Mientras su marido estaba en la fiesta Verónica tomó la decisión de contar que estaba infectada de coronavirus.

"Él se fue a la reunión. Las fiestas están prohibidas, pero se reunieron, quizá unas 20 o más personas. Tomó licor, habló con amigos, cuando recibió una llamada telefónica de su esposa. Ella le dijo que regresara, que no compartiera con nadie, porque ella tenía covid y él podía estar infectado", contó Mariela Gómez, hermana de José Antonio. 

Tras conocer el caso, el señor acudió con sus hijos para hacerse la prueba inmediata, sin embargo entregó negativo. La familiar se aisló sin supervisión médica, puesto que creían que estaban fuera de riesgo. 

Verónica también se  aisló y continuaba con malestares, fue el 14 de enero que requirió ser hospitalizada, debido a que presentó un cuadro de neumonía. 

El papá y sus hijos tenían tos por las noches y madrugadas, pero creyeron que ello se podría deber al gélido propio de la temporada. No obstante, dos días luego, José Antonio agravó y además tuvo que ser hospitalizado. 

El día 18 de enero Verónica no consiguió resistir y murió. La familiar consideró que no debían informarle a su marido, puesto que su estado de salud se complicaba. Al día siguiente, José Antonio murió. A medida que esto sucedía, la hija más grande, Nicol, expresó indicios más fuertes, como fiebre y dolor de cabeza, por lo cual tuvo que ser internada.

Los hermanos menores habían quedado bajo el cuidado de una persona de confianza y otros familiares. Los menores se encontraban bajo observación y procedimiento del doctor, sin embargo su salud agravó días después. 

El 27 de enero, los mellizos de 4 años fueron ingresados al nosocomio. "El reporte del doctor indicó que ambos tenían bronconeumonía”, describió Mariela García. Aquel mismo día, ambos murieron.

 

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