La declaración estará vigente a partir de este lunes y durante un periodo máximo de siete días, a menos que sea extendida o renovada por el Concilio de la Ciudad.
Tras obtener la firma del alcalde Nirenberg, la declaración activa el plan de manejo de emergencias de la Ciudad, que incluye la disponibilidad de albergues para personas evacuadas, la restricción del ingreso y la salida de la Ciudad, la examinación y regulación de hospitales, y el multar a quienes no cumplan con las medidas delineadas.
Ron Nirenberg, alcalde de San Antonio, Texas, declaró este lunes un “estado de desastre local y una emergencia de salud pública” ante el brote de COVID-19.
Esta declaración permite que se utilicen recursos del Plan de Manejo de Emergencias de la ciudad.
Esta declaración se produce después de que se supo que un paciente infectado con COVID-19 había sido liberado por error por el Centro de Control y Prevención de Enfermedades.
En San Antonio, medios locales indican que, hasta el momento, 11 personas han dado positivo a COVID-19.
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