La Policía de Zimbabue detuvo al líder de una secta apostólica y a otros siete miembros de su iglesia tras encontrar en su granja 16 tumbas y al menos 250 menores, de los cuales la mayoría estaban siendo obligados a llevar a cabo trabajos forzados, confirmaron las fuerzas de seguridad.
Según detalló a EFE uno de los portavoces de la Policía zimbabuense, Paul Nyathi, los ocho detenidos tras una redada en la finca el pasado 12 de marzo -incluyendo el líder y autoproclamado profeta Ishmael Chokurongerwa, de 56 años- son sospechosos de diferentes delitos, como abuso de menores.
"Las investigaciones realizadas por la Policía establecieron que 246 de los 251 niños menores de 18 años encontrados en la granja no tenían certificados de nacimiento y estaban siendo utilizados para realizar diversas actividades físicas en beneficio de los líderes de la secta", afirmó Nyathi en un comunicado difundido el pasado miércoles.
Tumbas
Asimismo, en el recinto, situado en la localidad de Nyabira, en la provincia de Mashonalandia Occidental (norte), se encontraron 16 tumbas, incluyendo nueve de adultos y siete de niños.
"Todos los entierros se llevaron a cabo sin registro previo en la oficina del Registro General en términos de la Ley de Registro de Nacimiento y Defunciones", aseguró el portavoz.
Según reportaron medios locales, los niños y las mujeres rescatados de la granja fueron llevados al hospital para someterse a pruebas y exámenes médicos que determinen su estado de salud y si sufrieron abusos.
"Nos están quitando por la fuerza a nuestros niños y mujeres. No sabemos a dónde los están llevando", declaró uno de los fieles, sin identificarse.
- Entre otras enseñanzas, la secta liderada por Chokurongerwa, conocida como Iglesia Apostólica de Johane Masowe (fundador de la organización) y con cientos de seguidores en Zimbabue, no permite leer la biblia, aceptar empleos fuera de la comunidad o acudir al hospital, además de imponer la poligamia y permitir el matrimonio temprano de niñas, según detalló a EFE la Policía.