El jefe de policía del distrito escolar de Uvalde, Texas, Pete Arredondo, renunció a su puesto ante los duros señalamientos de que falló en su respuesta al tiroteo en la escuela primaria Robb, que dejó sin vida a 19 estudiantes y dos profesoras.
Fue mediante una carta fechada el viernes emitió su renuncia “por el bien de la ciudad y para minimizar más distracciones”.
Cabe recordar que fue elegido al puesto en el concejo el pasado 7 de mayo y prestó juramento en una ceremonia privada el 31 del mismo mes, apenas una semana después de la masacre.
‘’El alcalde, el ayuntamiento y el personal de la ciudad deben seguir adelante para unir a nuestra comunidad una vez más’’, menciona Pete.
De igual forma estaba en licencia administrativa de su puesto en el distrito escolar desde el 22 de junio, a pesar de que un día antes el Ayuntamiento votó por unanimidad con el fin de denegarla; los familiares de las víctimas del tiroteo habían pedido a los dirigentes municipales que lo despidieran.
El Ayuntamiento de Uvalde hizo pública la carta de renuncia este sábado, luego de que los funcionarios municipales fueran notificados por correo electrónico de su intención de dimitir.
Arredondo ha tratado de defender sus acciones, diciendo al Texas Tribune que no se consideraba el comandante a cargo de las operaciones, y que asumió que otra persona había tomado el control de la respuesta de las fuerzas del orden.
Dijo que no tenía las radios de la policía y del campus, pero que utilizó su teléfono para pedir equipo táctico, un francotirador y las llaves del aula.
Hasta el momento no está claro por qué la policía tardó tanto en entrar, cómo se comunicaron entre sí durante el ataque y qué muestran sus cámaras corporales. Igualmente, las autoridades se han negado a dar más detalles, citando la investigación en curso.
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