Creemos que sabemos lo que significa el ronroneo del gato.
Sin duda es una de las señales más reconocidas de la satisfacción de un animal: un chirrido de placer cada vez que se le hace cosquillas o se acaricia un gato, la pista sonora de innumerables sesiones echado en el regazo de su dueño.
Pero esa no es toda la historia. Hay mucho más detrás del ronroneo de un gato de lo que te podrías imaginar.
Cómo lo hacen ha sido tema de debate durante mucho tiempo.
Algunos pensaban que estaba vinculado a la circulación de la sangre por la vena cava inferior, un vaso sanguíneo que lleva la sangre desoxigenada al lado derecho del corazón.
Pero, tras un poco más de investigación lo más probable es que el sonido se produce en los músculos dentro de la laringe del gato.
A medida que se mueven, dilatan y contraen la glotis -la parte de la laringe que rodea las cuerdas vocales- y el aire vibra cada vez que el gato inhala o exhala. ¿El resultado? Un ronroneo.
Un mecanismo misterioso
Aunque la ciencia está bastante segura de que ese es el proceso, no hay una respuesta definitiva sobre lo que lo motiva. La mayor clave está en un oscilador neural que se encuentra en lo profundo del cerebro felino, que no tiene otra función evidente.