Más de 100 toneladas de crudo han sido derramadas en las costas del noreste de Brasil desde inicios de septiembre, informó el ministro brasileño del Medio Ambiente el lunes.
Ricardo Salles señaló a través de Twitter que 42 ciudades han resultado afectadas por los derrames, pero no aclaró cómo alcanzó dichas cifras.
La policía brasileña investiga el origen del petróleo, que ha matado a por lo menos siete tortugas y obligado a nadadores y pescadores a mantenerse alejados de las zonas contaminadas.
La petrolera estatal Petrobras dijo que el crudo derramado no es del tipo que ella produce.
Se prevé que el presidente de Brasil Jair Bolsonaro reciba esta semana una evaluación preliminar de los derrames.