Canadá anunció hace unos días que no permitirá la explotación minera de los fondos marinos bajo su jurisdicción hasta que se establezca lo que llamó una "estructura reguladora rigurosa".
Zonas protegidasEsta declaración se divulgó al concluir en la ciudad de Vancouver las negociaciones del V Congreso Internacional de Áreas Marinas Protegidas (IMPAC5), que comenzó el viernes pasado.
"Canadá no dispone actualmente de un marco jurídico nacional que permita la explotación minera de los fondos marinos", asegura la declaración de los ministros de Recursos Naturales y Pesca y Océanos.
Los partidarios de la explotación minera en el mar alegan que se pueden extraer cómodamente del lecho gránulos de níquel y cobalto -utilizados en las baterías de los coches eléctricos-, lo que contribuiría a reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles.
Pero los científicos y varios grupos conservacionistas temen que esto pueda devastar sistemas marinos poco conocidos, que desempeñan un papel crucial en la regulación del clima.
El miércoles pasado, Ottawa también anunció planes para crear una nueva zona marina protegida en el océano Pacífico que se extendería desde la isla de Vancouver hasta la frontera canadiense con Alaska.
El nuevo plan, firmado también por varios grupos indígenas, acerca un poco más a Canadá a su objetivo de proteger el 30 por ciento de sus tierras y océanos para el año 2030, como se acordó en la histórica Cumbre sobre Biodiversidad celebrada en Montreal en diciembre.
La zona protegida propuesta alberga más de 64 especies de peces, 70 especies de aves marinas, 30 especies de mamíferos marinos, incluidas orcas, nutrias marinas y delfines, y 52 especies de invertebrados como moluscos, erizos de mar y pulpos.