El Gobierno francés prohibió la venta de fuegos artificiales, salvo a profesionales, de cara a los festejos de la fiesta nacional del 14 de julio, anunció la primera ministra, Élisabeth Borne, que prometió "medios masivos" para garantizar el orden.
Decreto
En los últimos días, la policía ha confiscado varios cargamentos de fuegos artificiales con destino dudoso, el más importante de ellos uno de 2,7 toneladas detectado en las cercanías de Rennes (noroeste).