El rabino jefe de Safed, Shmuel Eliyahu, ha afirmado que el terremoto de Turquía y Siria que se ha cobrado casi 40 mil vidas es un "castigo divino" que "limpia el mundo y lo hace un lugar mejor".
El rabino ha publicado una columna en el periódico conservador religioso 'Olam Katan' en el que compara el terremoto con la muerte de las fuerzas egipcias en el mar Rojo durante el Éxodo judío recogido en el Antiguo Testamento.
"Cantaban porque comprendían que era la justicia divina la que castigaba a los egipcios que habían ahogado a los hijos del pueblo de Isarel en el Nilo, para que todos los malvados del mundo lo vean y tengan miedo", añadió.
Así, ha citado un pasaje de la Biblia, del libro de Ezequiel, quien profetiza que cuando todos los judíos regresen a la tierra de Isarel "les llegará la venganza a todas las naciones que nos han hecho daño".
Algunos rabinos han criticado ya a Eliyahu, como el rabino Avraham Stav, que ha argumentado que el gozo por la muerte de los enemigos debe reservarse a los terrorista "no por los miles de niños que no nos han hecho nada y que han sido aplastados junto a sus padres".