¿Ahora será posible recolectar muestras de ADN por medio del aire?

Investigadores de la Universidad de Queen Mary lograron capturar muestras de ADN a través del aire

Científicos de la  Universidad de Queen Mary de  Londres demostraron por primera vez que el  ADN puede ser recogido del aire. El hallazgo podría proporcionar nuevas técnicas para investigadores forenses y antropólogos, incluso ayudar en la  comprensión de la transmisión de enfermedades como la  Covid-19.

El equipo de trabajo examinó si el  ADN ambiental (eADN) podría ser  recogido de muestras de aire y utilizado para identificar especies animales. La mayoría de los estudios similares hasta la fecha se han centrado en la  recolección de eADN del agua. "Las muestras pudieron ser detectadas con éxito de ratas topo desnudas y el ADN humano también fue posible encontrarlo en el aire", señaló la doctora  Elizabeth Clare, autora principal de la investigación.

Clare, detalló en el artículo publicado en  Science Focus que primero tomaron muestras de aire de una habitación la cual había albergado ratas topo. Después, utilizaron  técnicas para aplicaciones forenses existentes para comprobar si había secuencias de ADN dentro del aire. Asimismo, los expertos utilizaron una  bomba peristáltica combinada con  filtros de presión para tomar las muestras del ADN de rata topo de cinco a 20 minutos.

Seguido de ello, los expertos utilizaron  kits estándares para  encontrar y secuenciar los genes en las muestras resultantes. Los científicos demostraron que las pruebas publicadas demostraron que el  eADN animal puede abrir nuevas oportunidades para investigar comunidades animales en  ambientes de difícil acceso como cuevas o madrigueras.

La autora principal del trabajo científico apuntó que también puede ser empleado para ayudar a  comprender mejor la transmisión de enfermedades, entre ellas la Covid-19. "Nuestro trabajo puede ser utilizado para capturar ADN del aire para determinar si un sospechoso estuvo presente en una escena del crimen, hasta saber la forma en que se propagan los virus en el aire".

Cabe señalar, el grupo de científicos afirmaron que el experimento comenzó para tener  evaluaciones ecológicas. Ahora, el trabajo está enfocado potencialmente en  ciencias forenses, antropología e incluso medicina para ayudar a virólogos y epidemiólogos. Sin embargo el equipo de investigación se mantiene trabajando con  socios de la industria para aplicar la técnica de una forma más eficaz.

Por ahora, todavía hay  diversas limitantes para poder desarrollar el trabajo científico, una de las principales causas es el  distanciamiento social, ya que se necesita recopilar evidencia del mundo real. Todavía el  uso comercial está muy lejos, pues la unidad de investigación de la Universidad de Queen Mary necesita  desarrollar más aplicaciones prácticas e inversión privada.