La masacre en una fiesta ocurrida el pasado 20 de abril en Minatitlán, Veracruz, donde fue ejecutado hasta un niño de un año, revivió el terror en todos los rincones del estado. No es para menos: los secuestros casi se han triplicado, los homicidios no bajan y este estado es el lugar donde más fosas clandestinas se han hallado desde diciembre.
Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), los homicidios en la entidad siguen igual: desde 2017, en cada primer trimestre de año promedian cuatro al día .
Además, de enero a marzo de 2019 se han contabilizado 111 secuestros (un promedio de uno al día), cifra muy por arriba de los 38 que se registraron en el mismo periodo del año pasado o de los 46 registrados en los primeros meses de 2017.
Veracruz también encabeza la lista negra de entidades con mayor número de fosas clandestinas: tres de cada diez halladas en el país de diciembre a la fecha se descubrieron en este estado, de acuerdo con datos de la Secretaría de Gobernación.
Se trata de 34 por ciento de las fosas ubicadas entre el 1 de diciembre de 2018 y el 13 de mayo de 2019 en todo México.
Buena parte de esos hallazgos se dieron gracias al trabajo de los colectivos de familiares que buscan a sus desaparecidos y que desde 2012 se han organizado en diversos municipios del estado. Hoy, esos grupos de la sociedad civil también son amenazados por las organizaciones criminales.