Un 40% de mexicanos optaría por un gobierno encabezado por militares

Esta opinión prevalece en mexicanos de entre 18 y 19 años, con un un 20.8% muy de acuerdo y 30% algo de acuerdo

Tras la  revolución mexicana y el gobierno de algunos de sus caudillos, en  México se estableció un  sistema de gobierno presidencialista, civil, con división de poderes y elección democrática. Pese a esto, hoy en día un sector de la población  preferiría vivir bajo un sistema de gobierno distinto al actual. Según la Encuesta nacional de cultura cívica (ENCUCI), del  Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), un 40% de sus encuestados está muy de acuerdo o algo de acuerdo en tener un  gobierno encabezado por militares.

De este porcentaje de la población de 15 años o más,  16.6% está "muy de acuerdo" con un gobierno encabezado por militares, mientras 23.5% expresó estar "algo de acuerdo". De los hombres encuestados, un  16.9% de los hombres manifestó estar "muy de acuerdo" con dicho tipo de gobierno y un 22.5 sólo "algo de acuerdo". En el caso de las mujeres, los porcentajes fueron  16.3% y 24.4% para "muy de acuerdo" y "algo de acuerdo" respectivamente. En cuestión de edades, esta perspectiva estuvo particularmente presente entre las  personas de 18 y 19 años, con un 20.8% "muy de acuerdo" y 30% "algo de acuerdo".

Según el Inegi, la ENCUCI recaba información relevante sobre los  valores y prácticas ciudadanas con la finalidad de  entender el involucramiento de la ciudadanía en los asuntos públicos. También para conocer las características de la  cultura cívica de los mexicanos y su ejercicio de la ciudadanía. El objetivo final es diseñar estrategias para  promover la participación y la interacción constructiva entre autoridades e instituciones.

En  América Latina, durante la segunda mitad del siglo XX, muchos países pasaron por la experiencia de los  regímenes militares. Tal fue el caso de  Argentina, Bolivia, Uruguay, Chile, Paraguay, República Dominicana, Perú, Ecuador, Colombia, Nicaragua, Brasil, Venezuela; mientras  España y  Portugal en  Europa tuvieron experiencias similares. En términos generales, todos estos regímenes se constituyeron como  dictaduras militares, con un gobierno autoritario donde las fuerzas armadas controlaron, en mayor o menor medida, los  poderes ejecutivo, legislativo y judicial. Durante estas dictaduras, los militares impidieron cualquier forma de  control democrático y social, esto condujo a  graves violaciones de los derechos humanos.

Después del  golpe de Estado de 1976, en Argentina se instauró la dictadura militar conocida como Proceso de reorganización nacional, hasta la transición a la democracia en 1983. Este  Estado burocrático-autoritario se caracterizó por ejercer sistemáticamente el  terrorismo de Estado, por la desaparición de personas y el robo de bebés. Otro ejemplo es el caso de la  dictadura chilena encabezada por  Augusto Pinochet, que duró entre 1973 y 1990. Durante este régimen se estiman al menos 28 259 víctimas de  prisión política y tortura, aunado a muchos otras  personas ejecutadas y detenidos desaparecidos.

Ante tales  experiencias históricas, resulta  preocupante que un 40% de los mexicanos encuestados por el Inegi se muestre de acuerdo con tener un  gobierno encabezado por militares. Como suele decirse, la mejor manera de  no repetir la historia es conocerla, por lo cual es crucial el diseño de  mejores estrategias para acercar a los mexicanos con valores cívicos democráticos y de  respeto a los derechos humanos.