Ante la llegada de la Covid-19, surgió preocupación por el panorama para pacientes con trastornos respiratorios, como el asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Según la Organización mundial de la salud (OMS), en la actualidad hay en el mundo más de dos millones de personas con asma y, en 2016, la prevalencia de la EPOC fue de 251 millones de casos. Para conocer más sobre este tema, NotiPress acudió a un webinar de la empresa de investigación farmacéutica Boehringer Ingelheim y estos fueron los datos más relevantes.
Según el doctor Rafael Hernández Zenteno, neumólogo jefe del servicio de asma y EPOC del Instituto nacional de enfermedades respiratorias (INER), 3.3% de la población padece asma en México. Además señaló, con información del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, que la EPOC y el asma representan la séptima causa de defunción en México. En el mundo, afirmó, la EPOC pasó de ser la sexta causa de muerte, en 1990, a ser la tercera en 2020, de acuerdo a la OMS. En concreto, se refirió a la EPOC como un problema de salud de alta prevalencia, subdiagnosticada y subtratada en etapas tempranas y avanzadas.
En relación con la Covid-19, el doctor Hernández citó un estudio realizado en España donde su ubica a la EPOC como una comorbilidad en menos del 10% de los casos de Covid-19. Mencionó, el escenario es similar para México y que, pese a una tasa de contagios baja en personas con EPOC, los resultados suelen ser severos. También recomendó no suspender los tratamientos de base de las personas con EPOC y asma, pues con esto se ha observado un resultado más benévolo si se contagian. La adherencia al uso correcto del inhalador se relaciona con una redacción de la mortalidad, aunque aún se desconoce la razón de este efecto, señaló.
La otra ponente de este evento del 19 de marzo fue la doctora Rosa María Moctezuma, médica especialista en rehabilitación. Según su criterio y experiencia, la doctora asegura que el paciente con EPOC, poscovid o ambos debe ser el centro de las decisiones terapéuticas de rehabilitación. Asegura, estas terapias deben considerar las características clínicas y sociales únicas de cada paciente para formular un programa de recuperación a modo.
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Estos tratamientos, continuó, deben ser multidisciplinarios para atender las alteraciones funcionales respiratorias, músculo-esqueléticas, cognitivas y neuropsicológicas responsables de limitar la funcionalidad y la autonomía de los pacientes con EPOC y poscovid. Según la doctora Moctezuma, se ha demostrado que, si el proceso de rehabilitación inicia durante la fase aguda o crítica de la enfermedad, se reduce el grado de deterioro funcional y se acelera el proceso de recuperación.
Aunque trastornos respiratorios, como el asma y la EPOC, representan un porcentaje bajo de las comorbilidades de la Covid-19, vale la pena conocer el panorama respecto a estos padecimientos durante la pandemia. Esta información podría ayudar a los pacientes con estos diagnósticos a cuidarse mejor y a buscar tratamientos más efectivos en caso de contagiarse de coronavirus.