El 65 por ciento de la población mexicana percibe un salario que apenas le alcanza para adquirir lo necesario, mientras que al 20.7 por ciento su situación es peor, no le alcanza ni siquiera para eso.
Otro es el panorama para el 12.8 por ciento de los mexicanos. A ellos sí les alcanza para sus gastos y para ahorrar dinero.
Esta realidad se vio reflejada en la primera Encuesta Nacional sobre las Finanzas de los Hogares (ENFIH), levantada en 2019 en todo el país por Banxico y el Inegi para “conocer mejor la situación económica de los hogares en México”.
Si además tienen que afrontar imprevistos, las personas que se hallan en esta circunstancia, deben buscar la manera de conseguir dinero para cubrir esos imponderables.
ENDEUDARSE O REMATAR
Según la ENFIH, el 64. 9 por ciento de la población mayor de 18 años 0 más, recurre a préstamos de familiares, amigos o conocidos; el 35.5 por ciento prefiere vender bienes o empeñarlos; el 21.7 pide un adelanto de sueldo; el 19.7 por ciento utiliza sus ahorros, y el 17.9 opta por un crédito bancario.
De acuerdo a Banxico y el Inegi este sondeo llena un vacío de información sobre el balance financiero de los hogares mexicanos, que incluye tanto sus activos como sus pasivos.
Esta medición tiene como propósito “conocer las características de su distribución según particularidades de los hogares y sus integrantes”, datos relevantes que servirán para la toma de decisiones en materia de políticas públicas.
La encuesta se aplicó en dos momentos. El primero del 3 al 9 de septiembre de 2017 en 200 viviendas de los estados de Guanajuato, Nuevo León y Oaxaca.
El segundo, del 1 al 10 de abril de 2019 en 610 hogares de diez entidades federativas.
Se levantó para conocer la riqueza de los hogares mexicanos, conocer cuáles son sus activos no financieros (vivienda, autos, negocios) y financieros (tarjeta de nómina, ahorro, seguro de vida), así como sus deudas hipotecarias (vivienda, negocio, terreno) y no hipotecarias (tarjeta de créditos, departamentales, crédito automotriz).
UNA DEUDA DE 1,6 BILLONES
La deuda de los hogares de México alcanzó, en el 2019, un 1.6 billones de pesos. El 55.4 por ciento corresponde a deuda hipotecaria y el 44.6 por ciento a deuda no hipotecaria, de acuerdo a la primera Encuesta Nacional sobre las Finanzas de los Hogares (ENFIH).
Según esta medición, el 38. 7 por ciento del adeudo hipotecario es por la vivienda principal y el 16.7 por otras propiedades; en tanto que 11.5 por ciento es por tarjeta de crédito, el 8.4 por crédito de nómina o personal y el 9.3 por créditos para vehículos.
Esta deuda representa una carga para las familias mexicanas. Tanto que el 17 por ciento de sus ingresos se destina para el pago de la misma.
Según la ENFIH, la deuda total en relación con los ingresos efectivos anuales de los hogares mexicanos es el 10 por ciento y de 6.0 en relación con los activos totales.
La deuda hipotecaria representa el 50 por ciento del valor de la vivienda y el pago del servicio de la deuda abarca 15 por ciento del ingreso mensual de los hogares del país.
Los mexicanos viven del crédito bancario, departamental o automotriz. Todo con el poder de su firma. El consuma, estrene o viaje ahora y pague después es una constante en los hogares del país.
La deuda activa alcanza los 20. 9 millones de viviendas en México. La mayor parte tiene que ver con el crédito bancario y departamental, con el 60.2 por ciento.
El 18. 8 por ciento del adeudo corresponde a créditos de nómina o personal, el 11.6 por ciento al crédito para vehículos y 47 por ciento por otro tipo créditos.
El promedio de deuda por hogar por tarjeta de crédito es de 15 mil pesos, 37.2 mil pesos de nómina o personal, poquito más de 109 mil por financiamiento automotriz y 24 mil pesos por otro tipo de adeudo.
Según las cifras de la ENFIH, el 53. 8 por ciento de los hogares mexicanos tiene una deuda no hipotecaria, es decir, le deben a un banco, a una tienda departamental o a una empresa de autofinanciamiento
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