Ser sacerdote en México es una actividad de riesgo. En las últimas tres décadas más de 70 religiosos han sido asesinados en el país, 10% de esos homicidios ocurrieron en este gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
El reporte “Situación de la Iglesia Católica ante la violencia en México”, elaborado por el Centro Católico Multimedial, indica que México es el país peligroso para ejercer el sacerdocio en América Latina.
Entre 1990 y 2021, 79 sacerdotes y religiosos han sido agredidos, a los que se les suman las muertes de José Guadalupe Rivas, en Baja California y de los sacerdotes jesuitas Javier Campos Morales y Joaquín César Mora Salazar en Chihuahua.
Estados con el mayor número de sacerdotes y religiosos agredidos (1990 -2021)
En los últimos tres sexenios, se registraron 50 homicidios de sacerdotes. Fue en el de Enrique Peña Nieto cuando más asesinatos de religiosos hubo:
En lo que va de esta administración, siete sacerdotes han sido asesinados. En 2019 fue la primera muerte de un religioso en México en lo que va de este gobierno, cuando José Martín Guzmán Vega de la diócesis de Matamoros, fue asesinado la noche del 22 de agosto en el interior de su casa.
En 2021 ocurrieron tres homicidios de religiosos. Gumersindo Cortés González de la diócesis de Celaya, asesinado el 28 de marzo en la localidad de Cerrito de Guadalupe y San Antón de las Minas. Previo a su muerte, el padre había sido reportado como desaparecido.
Fray Juan Antonio Orozco Alvarado murió víctima del fuego cruzado por un enfrentamiento entre cárteles en los límites de Durango y Zacatecas. El padre de 33 años, era párroco en Santa Lucía de la Sierra, en el municipio de Valparaíso, Zacatecas.
Durante los primeros cinco meses de este año, suman tres los sacerdotes asesinados. José Guadalupe Rivas, quien también era presidente de la Casa del Migrante de Tecate, Baja California, fue encontrado sin vida el 17 de mayo.
El sacerdote de la diócesis de Tijuana y párroco de la Parroquia de San Judas Tadeo había sido reportado como desaparecido dos días antes de que su cuerpo fuera encontrado.
Javier Campos y Joaquín Mora fueron asesinados el pasado lunes en Cerocahui, comunidad del municipio de Urique en Chihuahua, junto a un guía de turistas que buscaba refugio en la iglesia tras ser perseguido por un hombre armado.
José Noriel Portillo, alias “El Chueco”, fue identificado como el presunto responsable de los hechos. El hombre de 30 años es presunto líder de “Los Salazar”, brazo armado del Cártel de Sinaloa en Chihuahua.
La violencia también ha ocasionado la desaparición de un cardenal, 61 sacerdotes, un diácono, cuatro religiosos, nueve laicos y una periodista católica.
Aumentan amenazas y extorsiones
Según el Centro Católico Multimedia, en la actual administración se han incrementado delitos de extorsión y fraudes contra sacerdotes y religiosos. También se han presentado con más frecuencia ataques a templos católicos.
“Ni las fiscalías estatales o la Fiscalía General de la República han dado repuestas claras a este fenómeno, por el contrario, las investigaciones son irregulares y con grandes vacíos. Más del 80% de los casos de asesinatos, extorsiones, ataques y robos contra templos católicos no han sido resueltos”, refiere el informe de finales del 2021.
Durante una Conferencia del Episcopado Mexicano pidió a las autoridades revisar las estrategias de seguridad al señalar que la estrategia ha fracasado. México está salpicando sangre por ‘tantos muertos y desaparecidos’, señaló en un video Ramón Castro, secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM).
Esto dice AMLO
Al presidente de la República López Obrador se le preguntó esta semana sobre la violencia contra los sacerdotes en el país, a lo que respondió que le parece muy ruin que se le señale por estos actos.
“Cuesta mucho trabajo también que se entienda, porque es un asunto muy polémico, separar lo que es la responsabilidad estatal de la responsabilidad federal. Se me hace muy ruin que se da un hecho como este, lamentable, porque sí duele, no sólo por los sacerdotes que están trabajando por los pobres y es una iglesia progresista, sino duele cualquier asesinato, pero estos hipócritas lo primero que hacen es voltear a ver hacia nosotros y hacia mí”, dijo.
Te puede interesar: Diputados de Morena buscarán regular la eutanasia en el próximo periodo ordinario