Un menor de 13 años se quito la vida, al haber si castigado sin su celular, en el poblado de Nuevo Progreso, perteneciente al municipio de Río Bravo en el estado de Tamaulipas.
El menor le aseguró a su madre que se quitaría la vida y después se retiró.
Ya por la noche notaron su ausencia y al entrarles la preocupación fueron a buscarlo hasta encontrarlo colgado cerca de la casa.
Al bajarlo procedieron a llevarlo a la delegación de Protección Civil donde lo recibieron.
Lamentablemente ya no tenía signos de vida por lo que llamaron a los agentes de la Policía Investigadora para que atendieran el caso.
Los hechos ocurrieron a las 21:00 horas y de acuerdo a las primeras indagatorias el adolescente respondía al nombre de Luis “N”.
Martha “N”, madre del menor, explicó a las autoridades que la probable causa de su determinación fue el quitarle su teléfono celular, además de diversas depresiones profundas que el adolescente ya padecía.