Ramas de árboles en el suelo, entablados, letreros y espectaculares caídos, techos colapsados e inundaciones son algunos de los estragos que se observó en un recorrido por las calles de Tulum tras el paso del huracán Beryl.
- Por las avenidas principales de la zona turística, cientos de ramas de palmera están regadas como rastro del avance de los vientos entre 160 y 175 kilómetros por hora característicos de un fenómeno de este tipo que perdió fuerza a categoría 1.
De acuerdo con testimonios de habitantes locales, "no pegó tan fuerte". Aseguraron a esta casa editorial que "hubo ciclones tropicales más violentos que este huracán" que no destruyeron su fuente de trabajo, que para la mayoría es el turismo.
Este viernes por la madrugada, los vientos del huracán retumbaron en las calles de Tulum para anunciar su arribo a las costas del Caribe mexicano.
Estragos luego de la tormenta
- Lluvias torrenciales con relámpagos cayeron en las calles de la ciudad donde, aún bajo alerta roja de máximo peligro, circularon vehículos y personas en bicicleta hasta casi las cinco de la mañana.
- El servicio energético, internet y la telefonía funcionó intermitentemente minutos antes de las 06:00 horas local. Después, la red telefónica colapsó, pero el internet estuvo activo durante todo el huracán.
- Relataron que en las dos horas críticas de Beryl, "el aire se escuchó como si fueran gritos". Asimismo, el azote de láminas, de ventanas y de otros objetos que volaron.
En la playa el oleaje fue intenso. El nivel del mar creció aproximadamente cuatro metros, de acuerdo con gente de la zona.