En un hospital del IMSS en Durango, extirparon un tumor abdominal de 17 kilos a una mujer, el tejido anormal había invadido el bazo y el riñón, lo que ponía en riesgo el funcionamiento de ambos órganos.
La cirugía fue compleja por el tamaño del tumor, actualmente la paciente de 50 años está plenamente recuperada y reintegrada a sus actividades.
El sarcoma retroperitoneal tenía un volumen extraordinario y su extirpación implicaba múltiples riesgos, principalmente por el sangrado abundante, pero la paciente solo perdió 800 mililitros por la técnica aplicada a la cirugía.
Puedes leer: Sismos sacuden a varios Estados de México; el mayor de magnitud 7.7