Uno de los factores principales en la toma de decisiones en el Tren Maya es el eje ambiental. Especialmente al momento de definir la infraestructura, ya que uno de los objetivos del proyecto es preservar el patrimonio ambiental y proteger la fauna endémica, por ello se realizará la construcción del drenaje transversal.
Esta obra restablecerá la continuidad de la red de drenaje natural del terreno a partir de dos estructuras clave: alcantarillas tubulares de concreto y alcantarillas de marco.
Estas estructuras permitirán evacuar adecuadamente el agua interceptada por la construcción, y además se diseñaron como estructuras que facilitarán el paso de vida silvestre.
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Emplear el sistema de drenaje transversal complementa la estrategia de pasos de fauna (estructuras que son puentes y/o pasos subterráneos que ayudarán a que las especies circulen libremente).
Esto reduce los costos de la obra y maximiza los beneficios para el medio ambiente. Así, el Tren Maya integra soluciones innovadoras, eficaces y sostenibles, para ejecutar medidas para cuidar el medio ambiente.
Avances generales de la obra:
● En el tramo 1, finalizan las labores de desmonte y desmontaje de vías para el primer subtramo.
● En el tramo 2, continúan con los trabajos de corte y terraplén, desmontaje de vías y despalme. Se trabaja en turnos nocturnos para compensar retrasos por condiciones climáticas.
● En el tramo 3, prosigue la adquisición de vías y se realizan labores de acompañamiento arqueológico en colaboración con el INAH. Se avanza con obras de drenaje transversal y con los pasos vehiculares.
● En el tramo 4, se avanza con las obras de terracería.