La Procuraduría de Protección al Ambiente (PPA) de Quintana Roo decomisó en el primer semestre de 2022 más de 500 mil artículos que no cumplían con la Ley de Gestión Integral de Residuos y Economía Circular por no ser biodegradables.
Además, se han iniciado más de 40 procedimientos contra las principales cadenas de autoservicio y tiendas de conveniencia, según Miguel Nadal Novelo, presidente de la APP estatal.
Junto con los comercializadores y distribuidores de productos desechables que han pagado multas de 100 mil a 200 mil pesos por comercializar e introducir plásticos ilegales, como vasos, platos, cubiertos, bolsas y similares.
Destacó que aunque la ley entró en vigor en 2019, el Estado otorgó una prórroga de dos años para que las inversiones de los negocios no se vieran perjudicadas y pudieran cerrar sus locales de venta de plásticos desechables. Sin embargo, una vez pasado el plazo, muchas empresas siguieron comprando y vendiendo los productos prohibidos a pesar de las advertencias.
El objetivo es sustituir por completo los artículos de plástico desechables para reducir el daño medioambiental causado por la difícil descomposición natural de los plásticos.
Se calcula que los artículos desechables, como vasos, platos, cubiertos, bolsas y similares, constituyen alrededor del 40% de los residuos sólidos que acaban en los vertederos.
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