Las gemelas Alondra Abigail y Edith Azucena Casas Hernández, de 17 años, desaparecieron el fin de semana y ahora las autoridades tienen como principal línea de investigación un culto religioso.
Niñas religiosasAmbas tenían tiempo de estar ligadas virtualmente a la Iglesia del Dios Todopoderoso, que se maneja a través de internet, denunció Azucena Hernández, madre de más menores de edad.
Dijo que sus hijas dejaron de estudiar al concluir la secundaria, no salían de casa ni tenían amistades, además de que se la pasaban conectadas a esa iglesia a través de Internet.
Asegura que no tienen recursos económicos ni para irse de casa por sus propios medios, y que integrantes de esa congregación religiosa les hicieron llegar computadoras y teléfonos celulares para que siguieran conectadas a la religión.
Ellas no trabajaban y ocupaban su tiempo casi todo el día en la religión virtual, pero siempre estaban a la defensiva ante cualquier reclamo de la mamá, y le respondían que era pecado. Tampoco tenían novio y ocupaban su tiempo al ir a la iglesia.
Desde hacía año y medio estaban involucradas con la iglesia y de acuerdo a la madre, tenían un comportamiento errático.
Los padres de las muchachas recordaron que alguna ocasión hubo una reunión de integrantes de la congregación en un domicilio del municipio de Escobedo y acudieron al mismo.
Sin identificarlo, un hombre les dijo que no se preocuparan, que tuvo comunicación reciente con las dos y que se encontraban bien.
Fue este sábado 4 de febrero cuando las menores fueron vistas por última vez en la colonia San Juan de Guadalupe, en el sector de la Alianza, al norte de Monterrey.