El desarrollador de este método para la creación de la gasolina a partir de basura fue el investigador independiente Eduardo Sahagún Ceniceros.
El investigador ha comentado que ante el incremento de los precios de los combustibles revisó otras pesquisas para lograr utilizar estos desechos para impulsar vehículos.
Pese a que algunos de sus colegas ya habían logrado avances en esta materia, no fue hasta que Sahagún se dedicara a experimentar que logró obtener diésel y gasolina aceptables para ser incluidas en un automóvil.
Debido a este descubrimiento, ha buscado un acercamiento con las autoridades para evitar que esto lo lleve a la cárcel, debido a que Pemex tiene el monopolio legal para aprovechar o crear este compuesto.
Sahagún dio conocer que el proceso para originar este líquido se lleva a cabo por dos procesos. El primero consiste en calcinar la basura y el segundo en la destilar el producto de esto.