Uno de los problemas que aqueja al país y al mundo la existencia de la obesidad infantil. No obstante, aunque se cree en muchas ocasiones que este problema se puede resolver solamente teniendo mejores hábitos alimenticios, la realidad es que se ha encontrado que esta condición es una multifactorial.
Mariana Torres Valdés, maestra en Nutrición Clínica, señala que, según la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad infantil se define de acuerdo a ciertos percentiles, que son valores que dividen un conjunto de datos estadísticos, de forma que un porcentaje de los mismos quede por debajo de dicho valor.
Entre las consecuencias de no atender la obesidad infantil, señala que de manera física puede generar valores bioquímicos alterados como lípidos, presión arterial, problemas endócrinos, entre otros, hablando de obesidad mórbida. Sin embargo, más allá de estos, las consecuencias emocionales y sociales que atraviesan estos cuerpos son igual de dañinas.
Al momento de hablar sobre la prevención de la obesidad infantil, considera importante enfatizar que esta se empieza desde la etapa uterina, siendo así que este proceso se encontrará en todas las etapas de la vida de una persona, pues en la gestación hay cierta programación metabólica.