Elvis nació el 8 de enero de 1935 en Tupelo, Misisipi en el seno de una familia humilde y con padres muy jóvenes. Desde niño, Elvis se destacó por su voz al punto tal de que sus maestros lo animaron a participar a sus 10 años en un concurso de en el Mississippi-Alabama Fair and Dairy Show.
En el 58, en la cúspide de su carrera, fue llamado por el ejército y destinado a Berlín Occidental, donde conoció a Priscilla Ann Beaulieu, con quien contrajo matrimonio nueve años después. A la vuelta, reanudó su actividad artística y sumó una larga serie de canciones que fueron número uno en las listas de ventas y protagonizó más de diez películas.
El éxito de Presley fue clave para que el rock and roll alcanzara un lugar privilegiado como género musical; además, le otorgó parte de ese carácter rebelde y juvenil. “Elvis Presley fue la encarnación de un nuevo estilo de vida musical”, escribió en una columna publicada en 2004 en LA PRENSA GRÁFICA el poeta David Escobar Galindo. “Hacía brotar una sensibilidad de otro tono, mucho más libre y expansiva”, agregó.
Los primeros años de la década del 70, sin embargo, supusieron para Elvis Presley un freno creativo, agravado sobre por su adicción. Se divorció de Priscilla Beaulieu y en sus últimas apariciones se lo vio con sobrepeso. A los 42 años y tras caer inconsciente varias veces en el escenario, murió de un ataque al corazón. Ese día nació la leyenda que lo catapultó nada menos que como “el rey del rock and roll”.
A pesar de los años, Elvis sigue siendo recordado como uno de los mayores exponentes musicales, un auténtico revolucionario de la industria y un artista que sigue inspirando a las nuevas generaciones.
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