Swank se casó con su actual marido, Philip Schneider, hace cuatro años en California, un año y medio después de que los dos se conocieran en una cita a ciegas.
La actriz, que durante la década de los 2000 fue uno de los rostros más destacados de Hollywood al ganar dos Óscar a la mejor interpretación femenina, abandonó los focos hace varios años para pasar más tiempo con su familia.
En 2015 se tomó un descanso de la actuación para cuidar de su padre, quien sufría una enfermedad respiratoria.