Carmen Campuzano abandonó todo por el amor de Andrés García

Hoy en día, la imagen Carmen Campuzano es conocida por aparecer en realitys como MasterChef Celebrity. Sin embargo, la belleza y talento de la actriz la tuvieron durante años en las pasarelas más reconocidas del mundo, una experiencia que sólo quedó atrás cuando una fuerte enfermedad le destruyó el rostro y la obligó terminar su apasionante relación con Andrés García, el hombre por el que habría abandonado hasta su trabajo.

La carrera de Carmen comenzó cuando aún era menor de edad. Para ese entonces grandes marcas ya volteaban hacia ella para hacerla parte de sus filas. Como modelo llegó a ser portada de la famosa revista Vogue y caminó para magnates de la industria de la moda como Christian Dior. 

El trabajo no paraba de llegar. A sus 17 años contrajo matrimonio con Guillermo Rossell, hijo de un famoso político mexicano, con quien tuvo una relación tormentosa. La modelo Martha Cristiana reveló a Historias Engarzadas que "él le daba unas tranquizas espantosas" y lo peor solo estaba por venir, pues poco después la actriz se enteraría de que su matrimonio era legalmente falso. 

Tras salir de esa relación, decidió unir su vida a la de Mario Carballido, el actor mexicano con quien tuvo a las gemelas Camila y Daniela, y con quien tampoco funcionó la relación.

En la década de los 1999, la diva recibió una llamada de la oficina de Andrés García que la invitaba a formar parte de la imagen de "Uña de gato", un producto que lanzaba en ese entonces y que los uniría para siempre. 

En medio de un tórrido enamoramiento, Campuzano comenzó a pasar gran parte de su vida junto al galán del cine mexicano. "Se alejó de las pasarela, creo que pensó que la relación con este señor iba a ser para toda la vida", relató la periodista Lourdes Valencia en un programa. 

El conflicto principal fue que ella y el actor solían viajar juntos muy seguido, lo que con el tiempo la hizo una persona poco localizable y cada vez menos buscada por los diseñadores. "Un alejamiento en todo sentido", señaló el diseñador Daniel Espinosa. "Recuerdo que Carmen estaba a punto de irse a vivir a España con Andrés y era ya un poquito difícil poderla ubicar o contactar. Estaba rodeada de un halo de misterio". 

En medio de este panorama, la modelo comenzó a sufrir fuertes dolores, consecuencias de una supuesta bacteria llamada leptoespirosis que junto con el problema de drogas y las cirugías plásticas terminó por destrozar su rostro. Este problema de salud la perseguiría por años y, aunque la pareja intentó que el tema no afectara la relación, las secuelas psicoemocionales y físicas fueron lo suficientemente fuertes para que la pareja terminara el apasionante romance.