Molesta por la forma en que Adrián Uribe y Consuelo Duval se expresaron de la etnia Seri, la activista Zara Monrroy dijo que los actores mienten, incluso, la producción "Infelices para Siempre" aún debe dinero a los lancheros que no salieron a trabajar para ayudarles.
La embajadora cultural Comca'ac o Seri, cantautora, poeta, danzante, traductora y defensora de los derechos de los pueblos indígenas, arremetió contra los actores porque:
- "Ahora resulta que hincaron al señor Jorge, el productor, si fueron prácticamente invadir nuestra isla, una zona sagrada, tuvimos que ir a sacarlos y porque teníamos un trato de palabras para trabajar con ellos, se quedaron 12 lanchas sin trabajar ese día para ayudar a la producción".
Agregó que la reserva indígena tiene sus usos y costumbres, "somos personas humildes y de gran corazón, cada visita coordinamos para que no tengan problema, tampoco no querían pagar la entrada, ni apoyar a los lancheros quizá por eso se fueron por otro camino pero fuimos a decirles y deben aún".
- A pesar de ello, Zara Monroy recriminó que hubieran utilizado el material filmado en la Isla del Tiburón.
Días atrás, en un propósito de promocionar la película filmada en 2019, los actores Adrián Uribe y Consuelo Duval revelaron en el programa La Cotorrisa que el rodaje no fue nada fácil y sufrieron varios sustos.
Aseguraron que pagaron "piso" a criminales y fueron encañonados por indígenas seris; como zona de guerra, expresaron.
En la entrevista para promocionar la cinta rodada en Puerto Peñasco, San Carlos, la Isla del Tiburón y el desierto de Sonora, detallaron que "esta película tiene acción pero tuvo más acción detrás de cámaras".
Fue la actriz Consuelo Duval quien inició contando los sustos y las peripecias que afrontaron para grabar la película, al referir lo que es ocurrió en la reserva indígena seri.
expresó, secundada por el actor Adrián Uribe al mencionar que el susto mayor fue para el productor Jorge Aragón.
De repente llegan, el jefe de gobierno de los seris, y traen su arma grande y toda la cosa, luego le dicen "haber, vengase para acá, ¿a quién le pidió permiso?, hínquese".
Se portaron muy bien, la verdad, porque sigo vivo, fui diabético a partir de entonces, comentó en broma el actor.