Luego de que el Tribunal Federal de Australia rechazó este domingo el recurso final presentado por el tenista Novak Djokovic para quedarse en el país, será finalmente deportado.
Fueron los jueces federales quienes rechazaron su apelación después de que el Gobierno cancelara inicialmente su visado por motivos de salud pública.
El Gobierno australiano menciono que con el tenista el tenista serbio, de 34 años en el país y sin tener vacuna contra el coronavirus, representaba una amenaza para la salud pública. Djokovic se quedará ahora sin defender su título del Abierto de Australia en Melbourne.
Ministro de Migración de Australia señaló que la presencia del tenista serbio fomentaría la oposición a la vacunación contra la Covid-19 en el país, según documentos judiciales publicados.
El tenista número pasó la noche del sábado detenido por inmigración. “Considero que la presencia del señor Djokovic en Australia puede representar un riesgo para la salud de la comunidad australiana”, indicó el ministro de Inmigración, Alex Hawke, en una carta explicando su decisión, que figuraba en una declaración jurada presentada por el equipo legal de Djokovic.
La exención médica del tenista Djokovic de los requisitos de vacunación para jugar el Abierto generó molestia en Australia, ya que ha sufrido los confinamientos por Covid-19 más duros del mundo y donde más del 90% de los adultos están vacunados, pero las tasas de hospitalización continúan alcanzando niveles récord.
Luego de recibir la negativa de Djokovic a recibir la vacuna ha alimentado el movimiento antivacunas, especialmente en su Serbia natal y los países vecinos.
Abogados de Djokovic argumentaron que la deportación solo fomentaría el sentimiento antivacunas y sería una amenaza para el desorden y la salud pública tanto como permitirle quedarse y eximirlo del requisito de Australia de que todos los visitantes estén vacunados.
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