En unos cuantos días se cumplirán 15 años exactamente desde que el terror de los pesos pesados en los años noventa, Mike Tyson, se subió a los encordados de manera oficial por última vez y hace un par de semanas el expugilista volvió a resurgir por los medios de comunicación al anunciar su regreso pero en formato exhibición.
Desde que Tyson afirmó que se está preparando físicamente para hacer su reaparición disputando peleas de exhibición a favor de las beneficencias, muchas empresas han mirado al “Iron” como una mina de oro, ya que la fanaticada del boxeo ha mostrado mucha interés por verlo de nuevo en acción, lo que podría generar una muy buena cantidad colocarlo como la atracción principal de un evento.
Pero en particular existe una que ha lanzado la casa por la ventana con una oferta sumamente descabellada, pues la Bare Knuckle Figting Championish, la cual monta funciones de combates sin guantes le puso sobre la mesa 18 millones de dólares para incursionar en esa nueva modalidad de pelea.
Pero las esperanzas fueron lanzadas por la borda por parte de su entrenador Rafael Cordeiro, quien declaró que Tyson no va a regresar al deporte para realizar este tipo de enfrentamientos.
"Él está entrenando para realizar una pelea de boxeo con guantes", sentenció.
Desde que Mike hizo el anuncio oficial sobre lo que vendrá para su futuro en el ámbito deportivo, pareció que levanto de las cenizas a varias leyendas del boxeo para ir tras de él, pues Evander Holyfield, también anunció que estará de vuelta y que quiere tener un tercer duelo con Tyson.
También se ha hablado de Lennox Lewis y Riddick Bowe, todos incluidos en el Salón de la Fama del Boxeo, como posibles adversarios para Tyson.