Con la programación ya establecida, los encuentros previamente seleccionados y los ánimos a tope por el inicio del Abierto de Australia tienen problemas. El que debiera ser un torneo capaz de reunir a los mejores tenistas del mundo, se ha visto eclipsado por la situación del tenista Novak Djokovic.
Djokovic, quien ha establecido una postura en contra de la vacunación contra Covid-19, recibió una exención médica debido a que padeció el virus con anterioridad. En este sentido, la exención otorgada por páneles médicos independientes del organismo Tennis Australia no fue suficiente para lograr el ingreso del serbio al país anfitrión.
Autoridades migratorias detuvieron la entrada al país de Djokovic en el aeropuerto de Melbourne, donde se le mantuvo hasta aclarar si su visa sería revocada. Las autoridades de Australia han fijado la postura de carácter obligatorio para cualquier visitante de poseer un esquema de vacunación completo y los atletas no fueron la excepción.
Jaala Pulford, ministra de Deportes del gobierno regional de Victoria, comentó en conferencia de prensa: "Quiero dejar absolutamente claro, como ha sido el caso todo el tiempo nadie está ni estará teniendo un trato especial por ser figura publica o por sus logros conseguidos profesionalmente".
Posteriormente, Djokovic fue trasladado a un hotel mientras su equipo legal buscaba revertir la situación a su favor y que este pudiera lograr participar en el torneo. La cita de apelación sobre la situación de la visa del deportista se llevó a cabo el 10 de enero. De esta manera, el juez Anthony Kelly liberó la visa del serbio dándole la posibilidad de ingresar al país.
Más tarde, Alex Hawke, ministro de Inmigración, canceló nuevamente la visa del tenista argumentando que se trata de un individuo no vacunado de "alto perfil". Por esta razón, su presencia podría poner en riesgo vidas y el orden civil, exacerbando el comportamiento antivacunas debido a la postura de Djokovic sobre la vacunación contra Covid-19.
"Derivado del estatus de alto perfil del Sr. Djokovic y su postura como un ejemplo a seguir en la comunidad tenista, su presente estancia en Australia puede fomentar un menosprecio hacia los requisitos establecidos de precaución de Covid-19 en Australia", escribió Hawke en documentación judicial ante el tribunal que lleva el caso del tenista.
Tras la publicación del documento, el equipo legal del serbio ha visto mermada la posibilidad de que el tenista logre su participación en el Abierto de Australia. Posterior a los eventos, compañeros tenistas también han dado su punto de vista referente a la situación migratoria de Djokovic, una de las más notorias han sido las afirmaciones de su rival Rafael Nadal.
"Te digo una cosa, está muy claro que Nova Djokovic es uno de los mejores jugadores en la historia de este deporte, sin duda. Pero no hay un jugador en la historia que sea más importante que el evento, ¿no? El jugador se queda y luego se va, y vienen otros jugadores" aseveró Nadal.
Por otra parte, Nadal afirmó que las cosas habían ido demasiado lejos, dominando los titulares y oscureciendo los resultados de la temporada inicial del tenis. Otros jugadores secundaron el sentir de Nadal, como Alex de Minaur de Australia, Garbiñe Muguruza de España y Emma Raducanu, de Inglaterra.
En caso de resultar afirmativa la deportación de Djokovic, se contemplaría la reprogramación del torneo e ingreso de otros atletas. En este sentido, una de las implicaciones hacia el tenista es la prohibición de su ingreso al país por un periodo de 3 años, lo cual representaría un duro golpe hacia su carrera.