Los Dodgers de Los Ángeles recuperaron la ventaja en la Serie Mundial al imponerse por 6-1 sobre los Rays de Tampa Bay en el tercer juego del Clásico de Otoño, inclinando la balanza 2-1 a su favor en Arlington, Texas.
Con excelente pitcheo del derecho Walker Buehler, además de los jonrones de Justin Turner y Austin Barnes, los californianos consiguieron imponer sus condiciones.
Buehler (1-0) dio un recital de pitcheo con seis entradas completas, en las que esparció apenas tres imparables con una solitaria carrera y la friolera de 10 ponches propinados.
En tanto, Turner, con el bate caliente, despachó vuelacerca en el primer inning y doblete, mientras que Barnes también se fue del parque en el sexto para sellar el marcador.
La historia dice que un Juego 3 puede cambiar el rumbo de la serie considerablemente. El ganador del Juego 3 en una serie al mejor de siete empatada 1-1 ha salido airoso al final de las hostilidades en 65 de 94 ocasiones, para un 69.1%.
El cuarto juego será este sábado en la misma sede del Globe Life Field de Arlington, con el mexicano Julio Urías en la lomita por los Dodgers, mientras que los Rays abrirán con el bullpen.
YARBROUGH ABRE POR LOS DE TAMPA
A pesar de tener un inusual relevo en el Juego 1 de la Serie Mundial el martes, el zurdo de los Rays, Ryan Yarbrough, dijo que estará listo para lanzar varias entradas en el Juego 4 ante los Dodgers el sábado.
“No creo que me afecte en lo absoluto, especialmente porque fue una carga de trabajo más corta”, dijo Yarbrough. “Siento que respondí bien al día siguiente. Me siento bien. Literalmente, voy a lanzar hasta que me quiten la pelota de las manos”.