El joven tabasqueño, Fernando López Torres, quien actualmente radica en Ontario, Canadá, y cursa los estudios de preparatoria en Cathedral High School GAELS, ha destacado como deportista de voleibol y, gracias a su talento, forma parte del equipo colegial en su centro de estudio.
El originario de Comalcalco, Tabasco, nos brindó una entrevista vía online, donde nos compartió sus experiencias como atleta formado en tierras chocas y nos platicó cómo orgullosamente ha demostrado contar con el potencial para competir y medirse por igual, con los atletas de la ciudad canadiense.
López Torres mencionó que llegó hasta la ciudad del país norteamericano, gracias a la migración que en el 2018 realizó toda su familia, pero no olvida que sus inicios y las bases en el voleibol, los tuvo en el Club Panteras, Tabasco, de Comalcalco.
"Desde hace ocho años practico este deporte y fue algo que inició como un hobbie, pero después se fue convirtiendo en una pasión hasta el día de hoy, además gracias a mi entrenador, Mario Ángel Murillo Flores, quien en todo momento me animó a tener confianza en mí mismo”.
Durante el tiempo que lleva radicando en Canadá, logró integrarse en la Liga de Voleibol Colegial en Cathedral High School GAELS, donde se le abrieron las puertas y ha conseguido sobresalir, ya que en enero de este 2020, concluyó la primera temporada con su equipo, siendo nominado como estrella ascendente de la liga, así como mejor servicio, al tener un promedio de entre 38 y 48 servicios efectivos, lo que inyectó más ánimo al voleibolista tabasqueño.
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Fernando es consciente de que, a pesar de contar con solo con 1.74 metros de estatura, en un deporte en el que la altura podría parecer determinante en un juego, esta situación no ha sido un obstáculo para él y continua siendo parte esencial en su equipo, “he aprendido a superar lo de mi estatura, y lo he tomado como una ventaja, porque en un juego de primero me subestiman, pero ya después que me ven jugar, me ven como una amenaza”.
La pandemia actual y la cuarentena, han sido también una prueba por superar, pues su día a día, al igual que el de todos los deportistas del mundo, ha sido suspendido por mantener las medidas de seguridad y del confinamiento en sus hogares.
Sus metas las tiene bien trazadas y sus sueños son aún más grandes, pues aspira a corto plazo, pertenecer a una liga universitaria y dar el salto a un equipo profesional, pero reconoce que aún tiene que seguir preparándose, “Algún día desearía formar parte de un equipo profesional, si Dios me da la fuerza y la capacidad, aunque aún me queda mucho por recorrer, pero eso es lo que me motiva en el voleibol”, concluyó el atleta.