Sin lugar a dudas el poeta mexicano Carlos Pellicer es la figura más importante de la cultura institucional tabasqueña pero, ¿los tabasqueños leen su poesía?
El poeta y crítico literario tabasqueño Isidoro Villator León refiere que la apropiación e influencia de la poesía pelliceriana dentro del ámbito literario es indiscutible. Pero más abajo, el grueso de la población “no pasa del tan mentado verso ‘Agua de Tabasco vengo / Y Agua de Tabasco voy...’”, pese a que es el autor tabasqueño más publicado hasta antes del coronabicho que dividió la historia contemporánea de la humanidad, sostiene en un breve apunte “intuitivo y a ‘posteriori’”.
EN UN APARADOR
Quizá la imagen exacta de lo que pondera Villator León en torno a la obra del autor de “Hora de junio” son los dos muestrarios de libros “pellicerianos” que se presentan en la Biblioteca del Estado José María Pino Suárez: el curioso los puede mirar tras los cristales protectores pero no se tocan, y no se leen.
Pellicer Cámara es un ritual cívico cultural que inicia cada 16 de enero con el festejo de su nacimiento, este año será el domingo que viene, y culmina cada 16 de febrero con el encuentro literario convocado por su aniversario luctuoso al que concurren escritores de todo calibre desde diferentes puntos de Latinoamérica.
Y no es para menos. Además de su poderosa obra, en Villahermosa, la ciudad donde naciera en 1897 cuando se llamó San Juan Bautista, fundó el Parque Museo La Venta y el Museo Regional de Antropología que la sitúan en las rutas del turismo internacional, y muere en 1997 como senador por Tabasco, en funciones.
Es el poeta con más esculturas en Tabasco, una de las principales avenidas de la ciudad capital de esta entidad, muchas escuelas, y el Premio Iberoamericano al mejor libro de poesía también llevan su nombre, que también figura en letras de oro en el Congreso local.
Pellicer siempre ha ocupado un lugar en las noticias y escaparates culturales, para algunos, el ranking de menciones escaló en el 2019 cuando el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, lo nombró como su maestro, aunque no aparece en la lista de libros gratuitos 21 para el 21 que impulsa la famosa
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¿Pero los tabasqueños se han apropiado de su poesía? Ante la pregunta, el catedrático tabasqueño por la UJAT, señala que no se conoce una investigación seria sobre apropiación de la poesía pelliceriana por parte de los tabasqueños en general.
“Para conocer sobre los alcances y apropiación de la lectura de uno de los poetas mayores del planeta tierra como sigue siendo Carlos Pellicer, ya no digamos de toda su obra, sino de por lo menos un par de poemas, tendríamos que conocer como mínimo los resultados serios de la investigación literaria sobre el tema al respecto”.
Lo que sabemos de manera “intuitiva y a ‘posteriori’” es que se trata del poeta que más se ha publicado en Tabasco hasta antes del “Coronavicho”; como para que los lectores pasarán de leer, así parece, “Cuatro cantos en mi tierra”, que es el poema dónde se encuentra el tan mentado verso “Agua de Tabasco vengo/Y Agua de Tabasco voy...”, como si la sola mención de éste fuera un indicativo de ser un lector de poesía de Pellicer. A cambio acepta que, “con respecto al alcance y apropiación de sus lectores-poetas es indiscutible su influencia”.