Los billetes de papel moneda impresos por los bancos y compañías privados durante los años comprendidos de 1864 a 1916, se conocieron con el nombre de "bancos".
Hasta el mes de agosto de 1913, se consideraron moneda del cuño corriente, porque estaban debidamente respaldados por la reserva en metales preciosos de sus emisores y eran fácilmente aceptados en su valor nominal.
La proliferación de estos billetes de banco se debió a la determinación del presidente Díaz de modernizar el país a través de un programa de urgente industrialización, propuesta que requirió de mayor cantidad de dinero circulante.
SUJETOS A LA CIRCUNSTANCIA
En 1897 se prohibió la impresión de billetes en denominaciones menores de cinco pesos, que tuvo vigencia hasta 1913, en plena revolución, cuando se agotó la provisión de monedas metálicas de baja denominación.
En agosto de ese año, Victoriano Huerta obligó a los bancos nacionales a intercambiar su déficit de moneda de baja denominación para depósitos del gobierno, a cambio de otorgarles el derecho de imprimir "bancos" no garantizados, es decir, sin el respaldo de metales preciosos u otra especie de garantía.
Años más tarde, con la ley que creó el Banco de México, estableciendo que sólo a éste se le permitiría la emisión de billetes y moneda del cuño corriente, los "bancos", dejaron de circular para siempre, siendo ahora, objetos de colección, muy apreciados por los conocedores.
TAMBIÉN EN TABASCOEn nuestro estado de Tabasco, también estuvieron en circulación estos billetes emitidos por el Banco de Tabasco, en las denominaciones de cinco, diez, veinte, cincuenta y cien pesos.
Este banco tuvo sucursales en Frontera, Macuspana, Teapa, Cunduacán, Comalcalco y Huimanguillo, Tabasco; así como en Pichucalco, Chiapas. Sus billetes fueron impresos por el American Bank Note Company de Nueva York.
En el anverso del billete de cinco pesos, se encuentra, en el centro, el Escudo de Armas de Tabasco y a la derecha la imagen de una india que representa a Malintzin; este grabado es el mismo que ilustra la segunda edición de la Historia de Tabasco de Manuel Gil y Sáenz.
En la parte central del billete de cien pesos, encontramos una hermosa estampa de una plantación de caña de un ingenio y, a la izquierda, una espléndida palmera.
Las firmas que ostentaron los billetes del Banco de Tabasco, fueron de los siguientes personajes: gerente: Teodoro Abaúnza y J. Rodríguez; consejeros: Manuel Romano Cue, José A. Bulnes, Nicolás P. Valenzuela, José González Lamadrid, Juan Ripoll Deyá, M. Suárez González, José G. Trueba y Rafael Sevilla C., y como interventor del gobierno: Luis Dorbecker.