Entre los trastornos de la conducta alimentaria (TCA), el más común en los menores de edad es la anorexia. Tanto la bulimia como el trastorno por atracón suelen aparecer más tarde, en la edad adulta.
Habitualmente, la anorexia debuta sobre los 14 o 15 años, aunque también hay algunos casos más tempranos, hacia los 12 o 13 e incluso a los 11. Pero en la mayoría de los casos afecta a adolescentes. Nueve de cada diez pacientes son mujeres.
¿Cuáles son las señales de alarma?
Detectar cuanto antes estos problemas y acudir al médico es fundamental para que la evolución sea mejor. El tratamiento suele ser largo, de unos tres o cuatro años, por lo que no hay tiempo que perder. Estas son las señales de alarma de que el niño o el adolescente puede estar teniendo un trastorno de este tipo..
Señales físicas
¿Qué hacer si hay sospechas?
Ante las sospechas de que el niño tiene un trastorno de la conducta alimentaria hay que actuar siempre. “Lo primero es hablar con el hijo en un clima de confianza. Hay que comentarle que lo que le sucede es un problema y que, como cualquier otra enfermedad, requiere de una valoración profesional