El otoño es la estación perfecta para arrancar a toda velocidad, una tabula rasa que nos permite trazarnos nuevas metas y cargarnos de energía para que el último empujón del año sea lo mejor posible. Es el momento ideal para coger impulso y encontrar las diferentes maneras que tenemos a nuestro alcance de potenciarnos a nosotros mismos, nuestro día a día y a nuestra familia. Es la oportunidad de retomar el ejercicio tras haber disfrutado del verano, transmitir la imagen que siempre hemos deseado, actualizar nuestra rutina de skincare, introducir comida altamente nutritiva en nuestra alimentación, y descubrir el poder que tienes de hacer que las cosas sucedan.
Confiando en tu propio power puedes ser capaz de ser tu mejor versión e influir en tu entorno para mejorarlo. Y para ello, necesitas nuevas formas de moverte que te lleven a conseguir ese cambio que tanto deseas.
Power walking: En un estilo de vida frenético en el que parece que “no tenemos tiempo” y ejercitarse pasa a un segundo plano, tenemos que buscar alternativas rápidas, pero altamente efectivas. Por eso, el power walking es el deporte de bajo impacto que está de moda esta temporada. Consiste simplemente en caminar a un ritmo acelerado controlando la postura, la intensidad y los cambios de velocidad. Es genial para quemar grasa corporal e, incluso, puede ayudarte a perder tantas calorías como el running.
Power dressing: ¿Vestirte en 5 minutos con un look lleno de poder? Desde hace décadas las mujeres son cada vez más conscientes del uso de la ropa estratégica para transmitir su estatus y establecer autoridad. A raíz de esto surge la siguiente conclusión: a mejor imagen, mayor influencia. Y hay varias piezas claves con las que puedes conseguir un power dressing exitoso: americana entallada, jumpsuits, prendas de colores sobrios como el azul marino o el vino tinto, y accesorios pulidos de buena calidad.
Power beauty: Tener un ritual de belleza según tu tipo de piel es algo que ya deberías tener más que establecido. Sin embargo, hay un tip de skincare que solo las veteranas conocen y muy pocas personas lo aplican: meter tus productos en el congelador. Esta práctica, que tomó fuerza especialmente en Instagram con unos monísimos mini refrigeradores, es ideal para enfriar las mascarillas, el contorno de ojos, los sueros y los tratamientos con retinol. De esta forma, alargas el tiempo de efectividad de los productos y estimulas su efecto en la piel.
Power food: No es un secreto para nadie que la comida es la principal fuente de energía de las personas. Sin embargo, sí es cierto que hay alimentos “superpoderosos” que potencian aún más nuestra vitalidad gracias a su alta concentración de vitaminas, minerales, antioxidantes y macronutrientes en pocas cantidades. Entre ellos están la avena, la cúrcuma, el jengibre, la linaza, los arándanos, la espinaca o la quinoa, entre muchos otros. Incluir estos alimentos en tu plan de nutrición diaria garantiza más power a tu dieta y la de tu familia.
Power driving: Y, por supuesto, no podíamos dejar de lado el power driving, esa experiencia única en conducción que te garantiza más poder y mayor potencia. En el camino de una vida llena de energía, necesitas un coche que se adapte a ti y, sobre todo, consiga seguirte el ritmo.
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